El Levante podría terminar el año de la peor manera posible. El equipo valenciano no sale de un disgusto con las lesiones sin meterse en otro. Y es que esta vez ha ha sido Juanfran el que no se ha podido entrenar en la penúltima sesión de los granotas antes de medirse al Málaga. Además, a todo esto hay que añadir la bajas por sanción que deben cumplir Fedal y el lateral izquierdo Toño e igualmente tampoco por lesión lo podrá hacer con Nikos, mientras que Ángel Trujillo acaba de recuperarse de sus problemas oculares.
De esta manera, para cubrir la ausencia de Feddal en el centro de la defensa, Rubi cuenta con las opciones de Trujillo que, pese a la evidente falta de ritmo, el técnico catalán ya ha comentado que cuenta con él como uno más tras superar la lesión de retina que le tuvo apartado dos meses de los terrenos de juego. Asimismo, Rubi que podía contar con Juanfran para el remplazo de Zizou tendrá que esperar a ver cómo evoluciona el jugador, que sufrió un golpe en el pie izquierdo en el entrenamiento el pasado domingo 27 de diciembre y hoy lunes se ha sometido a un tratamiento de fisioterapia y ha realizado un trabajo específico de recuperación que le deja pendiente de evaluación. De esta manera, el entrenador tendrá que esperar a ver cómo se encuentra el capitán este martes.
Aun así, en un caso extremo, el Levante podría utilizar a Morales como posible solución para esta demarcación de lateral izquierdo ante la ausencia de Toño y Nikos. Su contusión en la sesión del pasado sábado en el Ciutat de Valencia ha quedado en nada y hoy ha podido ejercitarse con normalidad. Asi pues, el madrileño ha completado el entrenamiento en su totalidad y estará a disposición de Rubi para medirse al Málaga. Finalemente, Víctor Casadesús también se recupera poco a poco del esguince de grado tres en el ligamento lateral interno de su rodilla izquierda que se produjo durante el encuentro de Copa contra el Espanyol. Está previsto que el jugador llegué a competir a mediados de febrero.