A la conclusión del partido entre Zaragoza y Alcorcón, Miguel Álvarez atendió a los medios de comunicación en la sala de prensa del Estadio de La Romareda, donde sólo tuvo que responder a una pregunta, pero de forma tajante y concisa.

Dos grandes errores defensivos

“Hemos cometido dos errores increíbles en la primera parte y eso es algo que no le puede pasar a un equipo tan sólido atrás como nosotros”, afirmó el entrenador. Con estos dos fallos se refiere al fallo en el marcaje del primer gol y al error en la cesión atrás de Antonio Martínez en el contragolpe que originó el segundo tanto maño.

Además el entrenador amarillo declaró que se “sufrió mucho ante un rival con jugadores de mucha calidad como es el Zaragoza” y eso no es buen síntoma.

La expulsión de Babín, clave

A pesar de ir perdiendo por dos goles, el Alcorcón “nunca dio por perdido el encuentro y seguía creando ocasiones importantes de gol”, pero la roja directa al central amarillo, con el penalti correspondiente anotado por Luís García “sentenció el choque”, afirmó Álvarez.

“La expulsión y el tercer gol han sido claves pero ni aún así, el equipo ha perdido la cara al partido y han seguido llegando al área de Leo Franco”, respondió el técnico jiennense.

A pesar de ello, el entrenador del Alcorcón no quiso hacer ninguna valoración del arbitraje y en todo momento apoyó a sus jugadores, ya que tienen que levantar la cabeza tras este tropiezo porque el miércoles viajan a Barcelona para jugar la vuelta de los octavos de final de la Copa de S.M. el Rey.

Este partido tiene una motivación extra ya que de vencer al conjunto españolista, el Real Madrid podría ser el rival en la siguiente ronda y poder repetir el famoso “Alcorconazo” de hace unos años.

El siguiente partido de liga que disputará el conjunto alfarero será el próximo sábado ante el Tenerife. Partido vital para poder salir de los puestos de descenso. Además, vital también para Miguel Álvarez ya que podría ver peligrar su puesto justo en el ecuador de la competición.