Con la salvación asegurada y en juego el último billete para optar al playoff de ascenso, el Alcorcón recibía a un Sporting de Gijón que se está jugando el ascenso directo y con mucha más necesidad de los tres puntos que los alfareros. Con cuatro jornadas por delante, los amarillos tienen muy difícil entrar en los playoffs de ascenso, aunque todavía matemáticamente es posible.

Bordalás no sorprendía y alineaba en  casa a su once tipo, con el único cambio de Usero por Sergio Mora, quién todavía estaba tocado del partido del pasado domingo ante el Tenerife, en el que los madrileños cosecharon un empate tras jugar una parte entera con diez jugadores. El técnico alicantino salía con Javi Jiménez en portería, Nagore, Djené, Chema y Bellvís en defensa; Usero y Fausto formaban en la medular escoltando a los cuatro de arriba.

Y es que José Bordalás, como siempre, confiaba en la velocidad como arma en el ataque, con dos puñales por banda como Guichón y Kiko Femenía, un mediapunta como Antonio Martínez, y arriba, el goleador del equipo, David Rodríguez. Sin embargo, todo este arsenal ofensivo no servía para controlar el partido, un choque que en la primera media hora no tuvo ninguna incidencia ni ninguna ocasión clara de peligro.

Sin ocasiones hasta el final

Hasta el minuto 36 parecía ser un partido plano, con mucha más voluntad que intención y con un juego en 30 metros. Ese fue el tiempo que tardó Guichón en despertar a la grada, casi tomada por completo por la afición del Sporting, con una jugada en la que atravesó todo el terreno de juego para acabar disparando y encontrándose con una gran mano de Cuéllar. El Sporting no tardó en reaccionar y obligó a Javi Jiménez a realizar una gran intervención.

El único balón que no pudo despejar el portero amarillo, el mejor del encuentro una vez más en los alfareros, acabó dentro de la red de la portería, pero anulado por fuera de juego, por lo que la primera parte acababa sin goles pero con la sensación de que el Sporting de Gijón merecía mucho más.

Tras el paso por los vestuarios, y con un homenaje bien merecido a los jugadores del Alcorcón “B”, el partido se reanudo con un carrusel de cambios en 20 minutos que le dio otro aire a la segunda mitad, sobre todo en los instantes finales. Con la entrada de Sergio Mora, Pastrana y Óscar Plano en el campo, el partido cambió, pero lo hizo para convertirse en un correcalles en el que el Sporting parecía estar a gustó, ya que generaba las mejores ocasiones de peligro.

El larguero salva al Alcorcón 

Pastrana en un disparo que salió fuera por poco y las jugadas a balón parado eran lo más peligrosos del Alcorcón, que se encomendaba a Javi Jiménez de nuevo para sacar algo positivo. Primero, con una intervención en boca de gol tras un error suyo en el que se confío demasiado y en el que entre él mismo y Chema Rodríguez estuvieron a punto de marcarse en su propia portería. Y después atajando seguro un balón de Carlos Castro que entre muchos rivales pudo sacar un disparo a puerta.

Sin embargo, el corazón de los aficionados de ambos equipos se iba a congelar por unos segundos en el minuto 91, cuando tras una falta colgada al área, Isma López remataba de volea al larguero, cerrando las tablas, y perdiendo para su equipo una ocasión de oro de puntuar en un campo tan complicado como Santo Domingo.

Al final, reparto de puntos entre un buen Alcorcón y un Sporting de Gijón que mereció más, pero que no pudo sacar nada más que un punto del feudo amarillo en uno de los últimos partidos de José Bordalás como entrenador de la Agrupación Deportiva Alcorcón, una vez que el mismo ha confirmado en rueda de prensa su adiós al club.