El pasado lunes el Mirandés hacía oficial la contratación del futbolista canario Aridane Santana. Tras la marcha del costamarfileño Lago Junior, los rojillos se tenían que mover rápido en el mercado para cerrar la contratación de algún jugador para cumplimentar la plantilla.
El fichaje de Aridane Santana le va a dar cosas muy diferentes a las que le daba Lago Junior. El delantero de 28 años destaca por su gran envergadura (1,91 m.) y por su juego dentro del área, hará unas aportaciones muy diferentes de las que daba el costamarfileño. Se mueve constantemente por el área aunque también participa mucho en las segundas jugadas, a espaldas de la portería. Debido a su corpulencia y su poder en los balones aéreos, Aridane ayudará mucho a sus compañeros en esa faceta del juego que tanto dominan los de Miranda de Ebro.
La velocidad no es el punto fuerte del delantero canario
Otro de los detalles a tener en cuenta es el peligro que lleva el canario en las jugadas a balón parado. El conjunto rojillo suma a los Galán, Álex Ortiz el poder desequilibrar encuentros en este tipo de jugadas que tantos puntos han dado a los de Anduva. No se espera ver mucha rapidez en este jugador, no destaca en eso. En las salidas a la contra del equipo, el delantero no participará en esas jugadas salvo para intentar abrir espacio a sus compañeros.
Una de sus cualidades es sus movimientos entre líneas. Su altura y su fortaleza darán muchos espacios a sus compañeros de cara a sorprender a las defensas contrarias, ya que intensificarán la vigilancia a un jugador muy potente en el juego por arriba. El Mirandés con la incorporación de Aridane Santana dará un salto en cuanto a trabajo y goles. El delantero será un elemento muy importante para los rojillos de cara a afrontar lo que resta de temporada.