El conjunto alicantino partía con problemas desde antes de arrancar el encuentro. Horas antes se confirmaba la baja de Ismael Falcón, que no pudo cumplir hoy su partido numero 100 como herculano, y la presión del ambiente se palpaba en los alrededores del feudo blanquiazul.

El equipo salió al campo intentando controlar el partido por medio de la posesión de balón y lanzó varios saques de esquina en los primeros minutos, aunque sin ningún resultado. A pesar de la mayor posesión Las Palmas no sufría arropada e intentaba salir al contragolpe aprovechando la velocidad y la potencia de un incansable Chrisantus, que obtuvo su premio poco después.

En el minuto 18 un mal despeje de la zaga alicantina y una genialidad, en forma de pase, de Juan Carlos Valerón, terminó con una vaselina precisa del delantero africano ante la salida de Aulestia.

A partir de aquí el Hércules creció, no le pudo la presión ni la ansiedad y sus posesiones comenzaron a llevar más peligro a la portería de Barbosa. Hasta que en el minuto 29 un potente disparo de Portillo era rechazado por el portero del conjunto canario y el posterior rechace, rematado por Peña, era desviado por Eldin, en posición dudosa, al fondo de la red. A partir de aquí ambos equipos buscaron el descanso y solo cabe destacar la lesión de Gorka Azkorra al filo del final de la primera parte.

La segunda mitad comenzó con un Hércules enchufado, con Yuste y Sissoko venidos a más dominando el centro del campo sin problemas y moviendo el balón con mucha velocidad. Toda esta intensidad y buen juego no debía quedar en nada, y así fue. En el minuto 47 una jugada de Eldin dejaba el balón de Sissoko que disparaba cruzado y ponía el balón en la misma escuadra de Barbosa. Un gol que sin duda es uno de los goles de la temporada y que levantó al público de sus asientos.

A partir de aquí Las Palmas intentó controlar más el juego y lanzarse al ataque. Los hombres de Quique Hernández se ordenaron y replegaron demostrando un gran rigor táctico y una gran solidez buscando sentenciar con velocidad a la contra.

La mejor ocasión del conjunto canario llegaría en un remate de cabeza de Vicente Gómez que despejó de manera providencial Aulestia, que no tuvo mucho más trabajo hasta la conclusión del partido.

El punto negro del encuentro lo puso Eldin Hadzic que tuvo que ser sustituido en el minuto 52 por una aparente lesión en la rodilla que no tiene buena pinta.

La victoria de hoy da un poco de aire a Quique Hernández y demuestra que el equipo cuando es intenso y serio en defensa es capaz de competir con cualquiera. Solo queda esperar que los resultados lleguen y arrojen un poco de luz sobre la gris temporada del equipo.

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