El Sporting de Gijón se reencontró con la victoria tras derrotar al Alavés por 2-0 ayer en el templo gijonés. El recuerdo de Riazor aún escocía pero “los jugadores han sido inteligentes” tal y como explicó José Ramón Sandoval en sala de prensa. Un hombre que ayer se encontraba feliz y orgulloso de sus jugadores y que no quiso entrar a valorar la actuación arbitral ya que piensa que “es lo mejor” en estos casos.
Los rojiblancos recuperan provisionalmente la segunda plaza a espera de lo que hagan Eibar, al que “será difícil sacar de ahí” según palabras del propio Sandoval, y Deportivo de la Coruña, mientras tanto el de Humanes ha valorado lo importante que es “seguir sumando” a partir de ahora y “la confianza que tienen en ellos mismos”.
No sólo destacó el valor de estos tres puntos sino cómo se consiguieron. “Era un partido muy difícil” afirmó el técnico rojiblanco y más ante “el mejor equipo que ha pasado por el Molinón”, en referencia a su rival, el Deportivo Alavés.
‘La Mareona’ es un factor clave para hacer del Molinón un fortín, pieza básica para que cualquier equipo opte a los puestos de cabeza, una afición que “ha estado soberbia, encima de los jugadores en cada jugada” explicaba orgulloso su técnico. Se crea un ambiente que “no es casualidad”, una atmósfera que convierte cada encuentro en una auténtica fiesta del fútbol y que espolea a un equipo que “ha sido muy maduro durante toda la semana”, añadió Sandoval.
El Sporting se enfrenta el próximo domingo a la sorpresa de la categoría, el Eibar. Los rojiblancos visitan Ipurúa con el objetivo de sacar los tres puntos y castigar a un rival directo en la lucha por el ascenso directo.