La mejor entrada de la temporada gracias a los más de 20.000 sportinguistas que poblaron las gradas del Molinón y una tarde soleada estimaban un buen presagio para cerrar el año futbolístico. El fondo ultra amaneció sentado en señal de protesta por las medidas tomadas con los grupos radicales en los estadios hasta la segunda mitad.

En los onces, la única cara nueva con respecto a la anterior jornada era la del toledano Guerrero, que ocupaba la punta de lanza rojiblanca en lugar de Pablo Pérez. Serrano hacía lo propio en el banquillo con el sitio de un aquejado Castro e Isma López se mantenía en el lateral zurdo de un lesionado Álex Menéndez.

Renuncia a la posesión

Duelo de inercias y de estilos de juego el vivido desde el pitido inicial sobre el verde del municipal gijonés. Dos equipos duchos a la hora de organizar contragolpes y poco enamorados de la posesión. Sin embargo, el anfitrión era quien hacía los honores de llevar la manija del encuentro e intentar encontrar un hueco en el organizado dispositivo de José Bordalás, que acumulaba siete encuentros sin conocer la derrota (por 17 de los locales).

Pañolada y pitos a la grada llegado el minuto cinco en contra de la directiva local. Isma combinaba entre tanto con Jony y dejaba detalles de su virtud en ataque. Dani Ndi, todo poderío, recuperaba con elegancia pero se mostraba poco preciso en los últimos metros de ataque como en otras jornadas.

Miguel Ángel Guerrero protagonizaba una gran maniobra instantes después para servir un pase al camerunés que dejó pasar para la llegada de un Jony que no se esperaba el balón y cuyo tiro fue poco potente. Cocinaban los de Abelardo un gol que no tardaría en llegar.

Bernardo era atendido en la banda con un corte en la cabeza tras un despeje por el que vio amarilla y presenciaba desde fuera cómo Cuéllar dejaba en el mano a mano a Jony para que el cangués se viera sorprendido por un muy atento Falcón en el despeje.

Una vez más, Luis Hernández hacía gala de su virtud desde la banda para poner un balón en el área pequeña al que no llegaría Guerrero pero que sí empujó con la testa Jony para anotar el primero de la tarde, el cuarto en su cuenta particular.

Peligro Alcorcón y sentencia local

Despertó el conjunto alfarero tras el gol y lo intentó a balón parado ante un Pichu Cuéllar muy atento. Los madrileños impregnaban de verticalidad cada movimiento en campo contrario y tuvieron un tiro desde la frontal del área gijonesa tras un mal rechace que el emeritense atraparía en dos tiempos.

Cuando más lo intentaba el Alcorcón y más arriba se había ido el conjunto amarillo, aprovechó una recuperación en campo propio Jony para cabalgar hasta el área rival y buscar el raso al segundo palo donde esperaba Ndi, pero el balón, repelido por un defensa, regresó al cangués, ya en línea de fondo, quien dejó el balón a la llegada de Isma López para que pusiera tierra de por medio cuando se cumplía la media hora de juego. Mazazo para los de Bordalás.

Valiente Alcorcón y piadoso Sporting

Djené no había tenido su tarde y Anderson ocupaba el lugar del lateral visitante. Mismo guión en los segundos cuarenta y cinco minutos, con la sensación de que los rojiblancos podían abultar el marcador si pisaban un poco más el acelerador.

Fruto del único desajuste de la defensa menos goleada de la liga llegó el tanto de la esperanza amarilla. Una contra con pase entre líneas a Anderson sirvió para que el recién incorporado pusiera el balón, que entró llorando, en la cepa del poste, lejos del alcance de Cuéllar.

Había entrado Jara por un resentido Ndi y una carrera suya por la banda con centro al primer palo no llegó por poco a la cabeza de Pablo Pérez. Juan Muñiz recogió el balón en el segundo palo y finalizó, pero su disparo fue repelido por un defensa. El propio rechace se sucedió con la misma secuencia sin llegar los rojiblancos a anotar el gol de la tranquilidad.

Poca miga más la que se pudo vivir en los minutos restantes, cuando casi ya al final Óscar Plano se buscó la segunda amarilla y encontró el camino de los vestuarios antes de tiempo. Tres puntos que se quedaron en El Molinón y que hacen empatar a 36 a Las Palmas y Sporting, dos primeros clasificados. Los guajes siguen imparables.