Jesé le da el triunfo al Madrid con el último gol del año

Con los deberes hechos en Champions League -clasificado para octavos de final-, y los deberes hechos en Copa del Rey -clasificado de igual modo para la ronda de octavos-, el Real Madrid necesitaba cerrar el año cumpliendo también en Liga. Porque ni Barcelona ni Atlético de Madrid habían hecho decrecer el ritmo y ambos rubricaban el último choque de este 2013 con sendas victorias que presionaban aún más, si cabía, al conjunto que entrena Carlo Ancelotti de cara a la necesidad de vencer en Mestalla para no perderle la estela al campeonato. 

 

Pocas novedades en un 'once', donde lo más destacado era la ausencia de Gareth Bale, que seguía aquejado de las dolencias que le habían mantenido al margen del equipo en la semana previa a la disputa del encuentro. Su lugar lo ocuparía su sustituto natural, Ángel Di María. Las novedades en el conjunto valenciano pasaban por el banquillo, que aún espera propietario definitivo tras la destitución de Djukic. Nico Estévez fue el encargado de dirigir el choque en el postrero encuentro del año para el Valencia. 

En lo que viene siendo la confirmación de la filosofía que Carlo Ancelotti trata de implantar en su equipo, el Real Madrid empezó tocando, con paciencia, criterio y sin demora en el avance; con prisa pero sin pausa en una fluidez que se desarrollaba correctamente hasta las inmediaciones del área valencianista, sin acabar de culminar, en los primeros compases de partido, en situaciones de peligro para Guaita. El Valencia, por su parte, tiraba de presión y de acciones expeditivas en el despeje, tratando de trabar y obstaculizar el juego de los blancos -de azul en la noche de hoy-. Decidido a hacer del contragolpe su mejor arma, al conjunto 'ché' no le asustaba aceptar un rol más secundario y dejar que fueran los de Ancelotti los que llevasen la manija del partido. Poco a poco y en el buen uso de sus recursos el Madrid empezaba a acercarse más, triangulando jugadas de gran movilidad y dinamismo entre sus jugadores.

 

Foto: Helios de la Rubia

 

La dinámica se prolongaba durante los primeros minutos, mientras Xabi Alonso se sacaba constantes pases que a menudo suponían la apertura del autopista hacia el peligro en meta local. Una buena llegada de Benzema hasta uno de ellos, a punto estaría de convertirse en la primera acción de verdadero peligro en botas 'merengues' pero el pase del francés acababa cruzando el área de izquierda a derecha sin encontrar rematador. A pesar de centrar buena parte de sus esfuerzos en tareas ofensivas, las labores de destrucción, robo y recuperación también se desarrollaban de forma destacable en las filas del conjunto visitante, propiciando que el balón durase poco en los pies del Valencia. De igual manera también el equipo local trataba de aprovechar las ocasiones que pudiera ser capaz de generar, un intento vano y estéril en la primera fase del encuentro.

 

Introducidos en esa inercia de toque y búsqueda del hueco, sólo un latigazo podía despertar las sensaciones en la grada de Mestalla y el gran candidato a llevarlos a cabo era Cristiano Ronaldo. El luso trató de aprovechar un buen pase de Benzema, que a su vez había sacado petróleo de un error de Oriol Romeu, para plantarse en el área y ejecutar un disparo cruzado que acabaría marchándose por línea de fondo. Este demasiado cruzado y el posterior, demasiado alto tras un recorte y medio en el que el portugués pidió mano del central valencianista. El '7' empezaba con su particular colección de intentonas, aunque en la primera fase del encuentro, sin goles. 

 

Foto: sqwavka

 

No aplacó los ánimos del Madrid el fallo de ocasiones y los 'merengues' continuaron acechando el área de Guaita con insistencia. Cerca de cumplirse la media hora de partido, el Madrid ya tenía completamente cercada la meta local, con continuas jugadas y movimientos que advertían a la zaga 'ché' de la posibilidad de que el remate pudiera llegar desde cualquier posición y de botas de cualquiera de los jugadores de ataque del conjunto 'merengue'. Y el aviso acabó convertido en realidad cuando Ángel Di María recibía en banda derecha un balón con el que hacer magia. El argentino recortó a su marcador y se sacó un trallazo con la pierna izquierda que batió, por fin, a Guaita. Minuto 28 y 0-1.

 

Viendo cuál era la tónica del encuentro, poco podía imaginarse la platea de Mestalla lo que iba a suceder en el minuto 34, cuando Bernat desarrollaba una gran jugada por la izquierda del conjunto local para enviar un balón al corazón del área y que Piatti, de cabeza, acabase estampando el cuero en el fondo de la malla defendida por Diego López. La jugada de Bernat fue medio gol de Piatti La euforia despertó a la grada y de paso, al equipo, que apenas se había prodigado en acciones ofensivas en la primera mitad del encuentro. Apenas un minuto después del tanto de la igualada, sería Bernat, autor de la jugada que desencadenaba finalmente en el tanto 'ché' el que lo intentaba por el centro, tratando de aprovechar una contra, con un disparo raso que se marchaba sin consecuencias para el Madrid.

 

La respuesta la daría Di María con un disparo lejano que a punto estuvo de sorprender a Guaita por alto, aunque el meta valencianista lograría desviar el balón a córner con un sutil toque con los dedos. Un balón perdido en el área valencainista daría para calificar de vivo un partido que minutos antes había exhibido un juego más sereno de toque, paciencia, búsqueda y sopeso. Y para acabar de certificar esto, hacía falta un gol, el que pondría en el marcador de Mestalla Cristiano Ronaldo, cerca ya del descanso. Di María botaba un libre indirecto bastante escorado respecto de la portería local y su centro lo aprovechaba el crack luso para retomar, de cabeza, la senda del gol, tras no anotar en El Sadar. Reclamaron los locales fuera de juego del futbolista portugués pero no lo entendió así el asistente de Teixeira Vitienes.

 

Foto: sqwavka

 

 Y si Cristiano había respondido a Piatti, Jonas trató de hacer lo propio con el luso, buscando el segundo para el Valencia, un gol que no llegó por muy poco después de que el jugador 'ché' se revolivera en el área de Diego López y disparase ligeramente escorado. Esta era la confirmación de que los locales, que habían sido poco menos que meros espectadores en los minutos iniciales del partido, acentuaron su participación buscando una mayor presencia ofensiva que no lograba verse culminada en los metros finales. Con esta intención por parte de ambos equipos y con este marcador se llegaría finalmente al descanso en Mestalla. 

 

 

Como si de un rebobinado se tratase, la reanudación presentó el mismo dibujo que la primera parte: el Madrid retomó el control del juego ante un Valencia que se posicionó 'a verlas venir', aunque presionando con intensidad y tratando de bloquear la fluidez en el juego rival. El dinamismo entre ambos equipos se visualizaba en la rapidez con la que los blancos tocaban y la ferocidad con la que los 'ches' buscaban obstruir la salida de balón, confiriéndole al encuentro un alto rimo en los primeros compases del segundo tiempo. Como consecuencia de esto, el Valencia lograba generar algunos robos, aunque sus jugadores no obtenían nada de esos balones. La primera excepción, no obstante, llegaba con el 5 cumplido, en el que los locales sacaban un córner, cuyo rechace acabaría en un disparo alto de Fede sin mayores consecuencias tampoco. 

 

 

A diferencia del primer tiempo, el Valencia lograba tocar algo más el balón en el intento de creación de jugadas ofensivas. Ante esto, un Madrid muy atento en trabajo defensivo, cortaba y recuperaba con relativa rapidez. La posesión que esto le concedía le permitía crear un mayor número de ocasiones, como la que disfrutaría Benzema tras una rápida triangulación en ataque con Cristiano, que el delantero francés acababa enviando fuera, rozando casi el poste de la portería valencianista. Los 'ches' seguían confiándolo todo al contragolpe pero sus salidas en velocidad no lograban hilvanar un gran número de toques seguidos, merced de la intervención de los blancos en la destrucción de juego rival. 

 

De una de las pocas jugadas que los locales lograron trenzar hasta la portería rival, llegaría, precisamente, la recompensa para los valencianistas. Esta acababa en cóner y el lanzamiento de esquina lo aprovecharía de manera incontestable Mathieu, alzándose sobre Sergio Ramos para enviar el balón al fondo de la malla defendida por Diego López. A pesar de que el peligro por parte del Valencia llegaba desde la banda izquierda, el remate que buscaría de forma muy peligrosa el 3-2 llegaría por la diestra. Feghouli sería el que buscaba el tanto con un remate lejano que blocaría en dos tiempos Diego López, evitando la vivaz llegada de Jonas, que trató sin fortuna de aprovechar el posible rechace. 

 

Foto: sqwavka

 

Jesé adelanta de nuevo al Madrid