Cambio de brújula

En las últimas temporadas, desde que Xabi Alonso llegase al Real Madrid, su concurso era a la par de incuestionable, indispensable, para mantener el equilibrio en el centro del campo merengue. Después de cinco campañas vistiendo de blanco, parece que al fin, en Concha Espina, hay otro hombre capaz de tomar el relevo.

Cambio de brújula
Foto | Dani Mullor - VAVEL
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Por Manuel Vergara

En el pasado mercado estival, el Real Madrid desembolsó la cantidad de 32 millones de euros para hacerse con los servicios de Asier Illarramendi. El de Mutriku, sustituto natural de Xabi Alonso en la Real Sociedad, fue el objeto de deseo de una directiva que pretendía convertirle también en el heredero de los galones del tolosarra en Madrid.

Pero el paso, hasta el momento, del centrocampista vasco no ha terminado de convencer en la Casa Blanca, que se veían en una nueva encrucijada para encontrarle sustituto, sino definitivo sí parcial, a Xabi. Y llegó, tras resolver que no renovaría su vínculo con el Bayern de Múnich, un hombre capaz de asumir los galones que quisieran darle, y hacerse incluso con alguno más.

Un binomio de lujo

Con Kroos, el Madrid por fin ha encontrado un jugador para cubrir con plenas garantías la posición de Xabi Alonso

En el partido ante el Sevilla durante la Supercopa de Europa, se pudo ver a un Toni Kroos desenvolviéndose como pez en el agua ejerciendo la función de vértice del triángulo abierto que Carlo Ancelotti plantea habitualmente en la franja ancha del terreno de juego. Aunque su posición natural se encuentra en uno de los costados en el medio, o incluso por detrás del punta, el germano, gracias a un enorme calidad, se puede adaptar a desempeñarse en esa demarcación.

En buena parte de la temporada pasada, defendiendo los colores del Bayern, Kroos se descolgaba de las posiciones de ataque para juntarse con los centrales y así mejorar la salida de balón. Ese primer paso hacia el ataque es el que en el Real Madrid tiene en Xabi Alonso a su principal canalizador, y que debido a la llegada del bávaro podría ver modificado.

No necesariamente eliminado, sino complementado. Puesto que aunque Kroos puede jugar en dicha demarcación, sus funciones son más efectivas unos metros más adelantado, y la entrada de Xabi Alonso escoltándole a él y a Modric en el centro podría dotar al cuadro merengue de un empaque necesario para partidos importantes.

Una nueva readaptación

Encuentros como el doble enfrentamiento que tiene que afrontar Ancelotti para derrotar al Atlético de Madrid y hacerse así con la Supercopa de España. El primero de los envites servirá para diseñar de un modo más preciso hacia dónde se encaminarán los pensamientos del de Reggiolo sobre su equipo modelo. Las piezas con las que cuenta esta temporada son cantidad y de gran calidad, por lo que el italiano deberá hacer encaje de bolillos para mantener en tensión a todos sus hombres.

Darle entrada de Xabi en la medular, juntándolo con Kroos y Modric es la decisión más lógica, a priori, para partidos de pugna por el dominio del control. Sustituir a cualquiera de los tres por Khedira, Di María o James, de modo especial, es una posibilidad que desarrollará Ancelotti con el paso de los encuentros. No en balde, fue la readaptación del argentin a la posición de interior lo que le abrió las puertas de la titularidad, y a Ancelotti, evitar un problema.

Ese reciclaje de Di María de un jugador eminentemente ofensivo, con gran desgaste en defensa, en uno que partía de posiciones más retrasadas y que en ocasiones se descolgaba en el ataque, fue fundamental para explicar buena parte de los éxitos de los blancos el pasado curso. En esta nueva campaña que se le abre al Madrid, si finalmente Kroos se habitúa a jugar como pivote, conformaría la segunda adaptación que Ancelotti lleva a cabo con éxito de uno de sus pupilos, y que termina siendo vital.

Es evidente que las combinaciones en la medular son sino incontables, sí múltiples, y cualquier decisión del técnico italiano dejará fuera a un futbolista de primera plana, que deberá esperar su oportunidad desde el banquillo. Lo que sí parece seguro es que o bien Xabi, o bien Kroos siempre saldrán desde el inicio en el vértice del triángulo, incluso juntos, logrando así, y tras varios años de búsqueda, juntar al maestro con un más que aventajado aprendiz.