El debut del Real Madrid en la edición 2014-2015 de la Champions League como vigente campeón llega en un momento de pequeña crisis. Son varios los errores de los que son acusados los jugadores y técnicos del club blanco, pero hay uno fundamental que el entrenador del equipo, Carlo Ancelotti, ha remarcado insistentemente en este inicio de curso: la falta de intensidad.
Este defecto que está provocando fugas en el sistema madridista ha sido el principal causante de las derrotas frente a la Real Sociedad (4-2) y Atlético de Madrid (1-2) en los últimos partidos de liga. El propio Ancelotti lo tiene claro, y tras los tropiezos ha asegurado que el problema es de intensidad, no del sistema. Ahora, su rival en el estreno en Europa, el FC Basel, supone una amenaza de cara al problema de los bajones de intensidad de los blancos. Las estadísticas muestran que es un equipo contra el que el Real Madrid tiene que andar con mucho cuidado.
El Basel prefiere la mitad de la primera parte y el final del partido
El vigente campeón de la liga de Suiza lleva ya ocho partidos jugados, con un balance de seis victorias y dos derrotas. En esas jornadas, se han destapado como un equipo que espera sus oportunidades, que busca su gol y que se resguarda para proteger el resultado. Además, los minutos finales se les dan bien.
Así se distribuyen los goles del Basilea según el intervalo de minutos. Fuente de las estadísticas: Soccerway.
Como se puede apreciar, los suizos suelen anotar alrededor del ecuador del primer tiempo. Del mismo modo, en el último cuarto de hora también es habitual verles conseguir el premio del gol fruto de su insistencia. La media de tiempo que tarda el Basilea en meter su primer gol esta temporada es de 20 minutos.
Defensivamente, las estadísticas dicen que el promedio de minutos que pasan hasta que los suizos encajan su primer gol es 48. La cifra crece si se atiende sólo a sus partidos como visitantes, donde los rivales tardan en abrir su cuenta una media de 53 minutos.
El Real Madrid, dependiente de sus arranques
Por parte de los madridistas, sus problemas relativos a los bajones de intensidad se reflejan claramente en sus estadísticas. Mientras que la mayoría de sus goles llegan en la primera parte, especialmente en el primer cuarto de hora, las segundas mitades son una sequía para los blancos.
En el aspecto defensivo, la media de minutos que transcurren esta temporada hasta que los madridistas encajan un gol es de 22 minutos.
Evitar cuestas demasiado empinadas
Las estadísticas contraponen a ambos conjuntos, pero en el caso de un Real Madrid en crisis, pueden despertar dudas en cuanto a lo que les espera a los blancos. En este inicio de temporada, el equipo de Ancelotti se ha apoyado en su efectividad al saltar al campo, marcando el 40 % de sus goles en el primer cuarto de hora. Sin embargo, el Basilea se hace fuerte fuera de casa, y el hecho de que los rivales no consigan estrenar su marcador como locales hasta el minuto 53 de media puede acabar provocando un atasco en el juego de los madridistas si no consiguen ver puerta con facilidad.
Parece, por tanto, que las puertas defensivas del Basilea se abren una vez que ha empezado la segunda mitad, pero es precisamente ahí cuando el Real Madrid se desinfla. Los merengues aún no saben en esta temporada lo que es marcar un gol entre el minuto 45 y el 75, por lo que llegar al descanso sin estar por delante en el marcador puede acabar siendo un problema a día de hoy.
El Basilea mete más goles entre el 15' y el 30', y el Madrid encaja su primer gol en el minuto 22 de mediaLos hombres de Ancelotti no sólo tendrán que estar pendientes de su efectividad, sino que también deberán prestar atención a la de su rival. El intervalo preferido del Basilea para marcar su primer gol es el segundo cuarto de hora de partido, y el minuto medio en el que los rivales del Madrid han abierto su cuenta es el 22. Del minuto quince al 30 los blancos se encontrarán en una situación que, independientemente de lo que pase sobre el campo, en términos estadísticos es de máximo peligro.
El final de partido también puede ser peligroso para el Real Madrid. El Basilea llega mucho más rodado al haber disputado ya ocho jornadas del campeonato liguero, y no sería extraño que el cuerpo de los suizos aguantase mejor el paso de los minutos. Una posible mayor frescura de los visitantes, unida a que el último cuarto de hora es un intervalo en el que marcan el 26,3 % de sus goles, hace del tramo final del encuentro otro foco de atención madridista.