Hasta catorce internacionales han abandonado las sesiones con el Real Madrid, para unirse a sus diferentes combinados nacionales, dejando al cuadro blanco en general y a Carlo Ancelotti en particular con tan solo ocho miembros del primer equipo con los que trabajar.

De esos ocho futbolistas, dos (Illarramendi y Carvajal), deben seguir rutinas específicas para terminar de recuperarse de sus diferentes molestias, que en ambos casos les han tenido casi dos semanas apartados de la rutina habitual de trabajo del equipo merengue.

De este modo, y ante la incapacidad de poder llevar a cabo una sesión normal de entrenamiento, Ancelotti ha reunido a Nacho, Arbeloa, Marcelo, Coentrao y Jesé, además de Pacheco, para que éstos trabajasen con los futbolistas del Castilla, en una sesión conjunta con los miembros del primer filial del equipo madridista. 

Los jugadores de campo se mezclaron con los mirlos blancos en el campo tres de entrenamiento de la Ciudad del Real Madrid, mientras que Pacheco se mantuvo al margen, en un campo anexo, realizando ejercicios específicos en una sesión particular y los dos tocados, Carvajal e Illarramendi, realizaron carrera contínua en solitario en el primero de los campos.