El Real Madrid deberá parar a reabastecerse en un inhóspito paraje. Cerca, no obstante, de terreno conocido, los pupilos de Carlo Ancelotti afrontarán uno de los duelos más importantes de la temporada. En la fase de la misma en la que se encuentra la competición, cada jornada pasa por ser el más relevante de la campaña, y el derbi ante el Atlético de Madrid no será una excepción.

En la temporada con más derbis (serán ocho con los dos continentales) de los últimos años, el cuadro madridista desembarca de su Drakkar en las tierras de Simeone y sus comanches. Los 'indios' aspiran a no solo no dar facilidades, sino a sobrepasar al rival regional como han venido haciendo en los últimos compromisos.

No en vano, desde la derrota en Lisboa el pasado 24 de mayo se han visto las caras en seis compromisos, con un balance de cuatro victorias rojiblancas y tan solo dos empates merengues, lo que deja el saldo en clara ventaja hacia los de Simeone. Pero el cuadro que dirige Ancelotti no baja el pistón, y lucha por recuperar el mando en la capital.

Recuperar el mando en la capital

Mano que, a nivel de títulos, sigue manteniendo, ya que a pesar de que en la Supercopa de Europa se proclamase vencedor el Atlético, es el Madrid el que llevó a sus vitrinas el trofeo más importante que ambos equipos se han jugado. Y es, precisamente, en la Champions dónde se quieren recuperar sensaciones perdidas jugando en la competición más grande del Viejo Continente.

Desde Lisboa, seis partidos, dos empates y cuatro victorias rojiblancas, incluido el 4-0 del último envite

Desde que Casillas levantase al cielo de Lisboa la Décima, Simeone se ha arremangado los machos y a los suyos les ha convencido, y éstos vencido. Cuatro victorias, un título y una eliminación de la Copa del Rey antes de tiempo. El 2-0 del Calderón con hasta nueve suplentes afectó, pero apenas un mes más tarde, a principios de febrero, los colchoneros infligieron una derrota aún más dolorosa.

En el mejor partido de la era Simeone, los locales arrasaron a un Madrid desnortado, inflingiéndole un potente 4-0 que sirviera de acicate para despertar a los blancos. Aunque con efecto retardado, el varapalo de los 'indios' aligeró el sueño de los 'vikingos', que con la vuelta de algunos de sus adalides (Pepe, Ramos, Modric, James...) ha retornado a la senda del triunfo.

A punto, de no ser por la falta de puntería, estuvieron de refrendar la mejoría en el Camp Nou, ante un Barcelona que pudo salir goleado y terminó venciendo y perdonando. Desde entonces, tres partidos, dos goleadas y una demostración de saber sufrir. Ante el Rayo, en Vallecas, lo segundo. Ante Eibar y sobre todo Granada, lo primero.

Llega Cristiano, el gran héroe madridista, al frente del Drakkar. Enganchado a las cuerdas de la proa, el luso será el primero en desembarcar en territorio comanche, y hacia él se girarán todas las cámaras y apuntarán los objetivos, para dilucidar buena parte de la suerte del Madrid. El mejor jugador del mundo llega en un estado de forma inmejorable.

Cristiano lleva siete de los últimos catorce goles del equipo en los tres últimos partidos

En la última semana, previa al envite madrileño, Cristiano ha sumado siete goles en tres partidos, incluida su mayor cuota goleadora en una tarde, que fue mañana, con cinco tantos al conjunto nazarí de Abel Resino. Cristiano, que fue suplente en la visita copera pero no en Liga, aspira a reeditar su suerte en Lisboa, dónde aún mermado, apuntó a la red para cerrar la goleada previa a la Décima.

Berlín aún aparece muy lejos en el horizonte. El Calderón, no tanto. Es imprescindible para el Madrid salir airoso del doble enfrentamiento con el Atlético para mantener las esperanzas de lograr el que hasta ahora ha pasado por ser un imposible: revalidar la Champions.