Algo más de 110 minutos de pretemporada tardó el Real Madrid en batir al portero rival. Tras permitir que la Roma se fuera indemne del primer envite en el tiempo de preparación, ante el Manchester City los hombres de Rafa Benítez no han querido repetir experiencia, y se han quitado de encima de forma rápida y eficiente la presión, mínima todavía, de lograr un gol.

Bale se abrió a banda derecha para hacer buena una galopada de Carvajal. El galés oteó el horizonte, y vio el desmarque al centro del área de Benzema y Cristiano Ronaldo, y tuvo clara la dirección del pase. El de Cardiff le sirvió el balón en bandeja a sus dos compañeros de la BBC, pero fue el francés el que llegó primero a impactar con el cuero, y superar a Hart.

Con una media volea de derecha, al palo largo, Karim Benzema inauguraba el casillero anotador del conjunto merengue en el minuto 21 de encuentro, acudiendo en masa el resto de sus compañeros para rodear al punta francés que celebraba el primer gol con la nueva elástica gris.

El Madrid no se detiene

Apenas cuatro minutos después, Cristiano Ronaldo hizo bueno el servicio de Toni Kroos en largo, se plantó ante Hart en ventaja, y con un suave toque con la puntera superó al inglés, que a pesar de rozar el cuero y correr hacia la línea para evitar que el esférico entrase en la portería, no logró detenerlo antes que éste sobrepasara la línea.

En la recta final de la primera parte, aprovechando un saque de esquina medido de Isco, llegó Pepe como un obús para impactar con el cuero y perforar por tercera ocasión antes del tiempo de descanso la portería inglesa, que se veía sobrepasado por el buen primer acto que cuajó el conjunto merengue.

Ya en el segundo acto, y a los pocos minutos de entrar en el campo, el mirlo blanco Denis Cheryshev apareció para hacer bueno una nueva gran jugada de Isco, y logró a portería vacía un nuevo gol, que cerraba así la goleada con la que el Madrid se despedía de Australia.