Revés para Zinedine Zidane de cara a la Champions League. La vuelta de la máxima competición continental está a la vuelta de la esquina, tras dos meses de parón, y el técnico galo del Real Madrid ha recibido una mala noticia para el envite en el Olímpico de Roma ante el cuadro capitalino: todo indica que no podrá contar con Gareth Bale.
El futbolista de Cardiff caía lesionado el pasado 17 de enero en el tramo final del primer tiempo ante el Sporting de Gijón, y tras pasar pruebas se estimó un tiempo de baja cercano a las tres semanas por un problema en el sóleo de su pierna derecha, lo que le permitiría, justo, llegar al primer partido de la eliminatoria frente a la Roma.
Bale habría recaído de sus problemas en el sóleo, lo que le convierte en más que seria duda para el partido de ida de octavos ante la Roma
Pero parece que las posibilidades de ver al galés de nuevo en el campo para la Champions se han esfumado. El diario MARCA informa de una recaída en el proceso de recuperación de sus problemas en el sóleo, lo que habría infundido en el club una alta dosis de pesimismo acerca de su participación en el encuentro de ida de octavos, que viendo lo sucedido, parece casi descartada.
Aunque el propio Zidane en rueda de prensa aventuraba que Bale retomaría el trabajo con el grupo la semana pasada, la realidad es que el galés no se ha integrado en las rutinas del equipo. Se le vio mejorar y realizar intensas sesiones en la arena, pero desde finales de la semana pasada desapareció del verde, y ahora, de confirmarse la información vertida por el citado medio, la presencia del de Cardiff sobre el campo se pospondría aún más.
Bale se lesionó cuando mejor estaba jugando en la temporada. Tras hacer nueve goles en los cinco partidos previos a la lesión. En total, el galés ha disputado esta temporada 17 encuentros, logrando 13 goles en un total de 1265 minutos.