Las sensaciones que dejó el Krasnodar sobre el césped de Anoeta confirmaron la rumorología que se había instaurado en San Sebastián. Los rusos eran mejores de lo que se esperaba. Con una defensa férrea y sin fisuras se plantaron ni cortos ni perezosos a ver pasar los minutos, mientras la Real Sociedad intentaba sin acierto perforar el entramado defensivo.  Los rusos se atrincheraban atrás, dejando libres a sus tres hombres más ofensivos, para que estos aprovecharan los espacios que dejaba tras de sí el equipo de Jagoba Arrasate. El gol de Xabi Prieto sirvió para permitir que la Real viaje al Kuban Krasnodar con una ventaja, mínima, pero una ventaja.

El partido del jueves sirvió para dilucidar varios aspectos. El primero, la falta de pólvora de la Real en estos primeros compases de la temporada. Con Finnbogason lesionado y Vela entrando en la dinámica del equipo tras su lesión, las miradas recaen sobre Imanol Agirretxe. El delantero txuri urdin ayer no tuvo fortuna y cuajó un partido irregular y volvió a generar dudas con respecto a su juego.

Otro de los aspectos a destacar fue el buen partido que realizó Gorka Elustondo, su partido en la zaga fue correcto y empieza a despejar las dudas que se cernían sobre su rendimiento como central.  Al igual que los fallos se recuerdan hasta la saciedad, los aciertos también deben serlo.

Quizás el mejor momento del partido fue cuando Carlos Vela saltó al terreno de juego, el mexicano estaba para 15 minutos. Anoeta despertaba con la entrada del mexicano. Este año será la referencia en el equipo de Arrasate. Tanto es así que el cambio de sistema de juego que ha planteado el míster de Berriatúa podría obedecer a un sistema más favorable, si cabe, al juego del extremo mexicano.

El partido de vuelta aguarda la semana que viene. El frío será el menor de los problemas de la Real, el Krasnodar debe salir al ataque y viendo como se desarrolló el partido, la Real tendrá que pelear mucho y muy bien para conseguir el resultado que le acredite como equipo de la UEFA Europa League