Esta claro que el Real Valladolid no ha acabado la primera vuelta con buen pie. Dieciséis puntos dejan a los de Juan Ignacio Martínez en puestos de descenso, merecido puestos, por cierto. En los últimos tres partidos, el equipo ha encajado ocho goles y ha convertido solo dos. Registros horribles que dejan a la defensa en evidencia y al entrenador contra las cuerdas, después de largas jornadas en las que los plumillas han tenido que escuchar desde disculpas, hasta comentarios optimistas después de perder por cuatro goles.

El partido de ayer noche ha sido la gota que colma el vaso, un vaso amargo que envenena poco a poco al Real Valladolid y le deja a la cola de la clasificación liguera, solo superado por Rayo Vallecano y Betis. Cuatro goles que parecieron sablazos, de momento sin ningún remedio. Saliendo al verde sin ganas, sin dar un grato espectáculo al público que volverá a Zorrilla la semana que viene con el deseo de que la derrota sea lo menos dolorosa posible, el Valladolid dio el partido por perdido. La enfermería bulle y desde las oficinas del club no llegan noticias de nuevas incorporaciones. El equipo está en peligro: sin dinero para fichar, acumulando 72 millones de deuda y en una situación deportiva pésima. Los problemas no faltan en casa del pobre y ahora, abierta la veda para cazar una buena incorporación, los nombres de algún central, medio centro o extremo no se leen en los periódicos ni se oyen en las radios. La directiva se hace de rogar mientras los partidos van pasando y la situación, lejos de mejorar, empeora.

Mientras rivales directos se refuerzan para no descender, los vallisoletanos siguen con los mismos que empezaron la temporada. Los aficionados pitan a los once que salen de inicio y no es para menos cuando empiezan a jugar. Estudiando al equipo por líneas se puede constatar que la defensa hace aguas, el centro del campo está desaparecido y la punta de ataque hace lo que puede ante los pocos balones que llegan. La pregunta esencial es: ¿Qué es lo que falla? Y una segunda: ¿Cómo mejorarlo? Ahí van algunas claves de lo que falla y de cómo mejorarlo:

1. La portería: Mariño, sitiando los cuatros palos

En primer lugar, la portería es el único puesto seguro en el equipo. El fichaje de Mariño ha sido un acierto rotundo y ha mejorado con creces lo que se tenía el año pasado (Jaime y Dani Hernández). Ha salvado numerosas veces al Valladolid de caer vapuleado y aunque contra el Granada ha estado fallón, el resto de actuaciones han rozado la perfección. Ningún reproche al cancerbero gallego. Jaime sigue esperando su oportunidad en el banquillo ya que en Copa, donde él participó, el equipo ha sido eliminado a las primeras de cambio.

2. La defensa: el origen de todos los males

¿Qué es lo que falla?

Si comienzan desde los laterales se toparán con el serbio Rukavina. Es cierto que no es del año pasado, jugador revelación y uno de los mejores zagueros de la Liga. Esta campaña está haciendo partidos bastante mediocres, lejos de todo lo que puede dar de sí. En la zona de centrales se encuentra Rueda. El extremeño está siendo de lo peor del equipo en esta primera vuelta. Generalmente es un central muy seguro, con buena salida de balón pero todo eso no se está haciendo patente en el terreno de juego. Marc Valiente es su pareja en el pivote defensivo y al contrario que su compañero, su trabajo es correcto y aceptable aunque más trabado que el de otras temporadas en las que fue dueño y señor de la zaga. Por último, Carlos Peña. Es el único hombre de la línea de atrás del que no hay queja. Su entrega es encomiable y partido a partido demuestra que ha sido de los mejores defensores, tanto a nivel deportivo como a nivel personal, que ha tenido el Valladolid en muchos años.

¿Cómo mejorarlo?

El recambio de Rukavina es Alcatraz, ahora lesionado y haber sufrido un posterior accidente de coche del que afortunadamente ha salido prácticamente ileso. El colombiano no mejora lo que hay en el lateral derecho, aunque su polivalencia -puede actuar en banda-, seguramente sirva a lo largo de este curso. Por el momento, Juan Ignacio Martínez le ha probado tanto en su posición natural como en la banda derecha y el resultado no ha dado los frutos esperados; por lo que el serbio seguirá siendo el propietario del lateral diestro. Con los centrales, sobre todo con Jesús Rueda, llegan los problemas. Su posición es la más vulnerada y seguramente donde más haga falta un nuevo fichaje. Dado que la alta de Heinz ha sido un esperpento y que el entrenador no cuenta con él, el Valladolid se encuentra sin suplentes para los centrales, aunque Peña puede ser un buen parche en caso de lesión de Rueda o Valiente. Según algunas fuentes, las altas esferas blanquivioletas ya se han puesto en contacto con jugadores. El primer rumor fue el de Paulo Vinícius, central carioca del Sporting de Braga que cobró mayor relevancia cuando Rukavina dejó de ocupar plaza de extracomunitario, la cual serviría para el defensa brasileño. Las informaciones del diario luso Record fueron las detonantes de tal especulación, aunque gentes cercanas al club castellano ya lo han desmentido.


El siguiente nombre que se barajó fue el de Dominic Maroh, central del Colonia, de la 2.Bundesliga o segunda división alemana, liga de la que proceden los fichajes más brillantes de la temporada anterior, Ebert y el propio Rukavina. El blog Rumores Fichajes Pucela ha sido el que ha dado la información, aunque su veracidad es una gran duda.

3. El centro del campo: desaparecido en combate

¿Qué es lo que falla?

El doble pivote de mediocampistas es deficitario. Ni el fichaje del italiano Fausto Rossi ni la vuelta a los terrenos de juego de Víctor Pérez han servido para revitalizar a un equipo que ya desde el año pasado tenía un gran vacío en esa zona. Álvaro Rubio lleva un par de temporadas a un nivel bastante bajo y aunque su función implica no aparecer con regularidad, en esta primera vuelta apenas ha aportado unos cuantos cortes en todos los partidos que Juan Ignacio le ha alineado. Por otra parte, Sastre no tiene unos mínimos que le permitan jugar en un club de Primera y Javier Baraja, central reconvertido a medio centro, tampoco está para disputar la máxima competición, de hecho, es más bien un jugador carismático que más allá de ser importante en el campo, lo es en el vestuario.

En este caso, las soluciones no resultan tan variadas. Las posibilidades de un fichaje son remotas teniendo en cuenta que son cinco futbolistas para dos puestos. Si se cuenta con que seguramente Álvaro Rubio y Baraja cuelguen las botas el año que viene y si a Sastre se le decide buscar un nuevo equipo, intentar incorporar a un nuevo medio centro con vistas a la temporada siguiente sería una magnífica noticia si es que Lázaro rompe con el Real Valladolid.

¿Cómo mejorarlo?

Mitchell Donald es el hombre que más suena para ocupar el medio centro. Nuevofutbol.com, resultados-futbol.com y rodajclive.wordpress.com se hicieron eco de la noticia que ya venía coleando desde el verano. Se trata de un centrocampista holandés, polivalente, con caída a la banda derecha e incluso en disposición de jugar como medio centro ofensivo, es decir, también como recambio de Óscar. Esta temporada, prestando servicios al Roda ha convertido cinco goles y ha dado una asistencia, siendo en la 2010/2011 el máximo asistente, mérito compartido con Eriksen y Mertens. Procede de la cantera del Ajax, una de las mejores de Europa, aquella que, a la postre, produjo “la naranja mecánica”. Entre cesiones del Ajax al Willem recaló definitivamente en el Roda. El equipo está al borde del descenso y quizá su mejor jugador sea Mitchell Donald, aunque cuentan con el también medio centro, Anouar Kali, que puede que tenga más futuro que el pretendido por el Real Valladolid. En principio, parece loable el fichaje del prometedor jugador holandés, que podría servir como sustituto de Rossi y Víctor Pérez, incluso de Óscar y de Ebert, aunque con las arcas caninas como las tiene el pucela, cualquier nueva incorporación supone un esfuerzo estoico.

La otra posibilidad, que seguramente sea la más realista, es que se acabe la temporada con Rossi como medio centro de contención y con Víctor Pérez, aún en proceso de adaptación tras una larga lesión, como medio centro creador. El italiano, al que ya le apodan como “el nuevo Pirlo”, tiene ímpetu y calidad aunque, como cualquier chico joven, peca de inexperiencia e inseguridad. Su compañero Víctor Pérez, ya curtido en mil batallas pese a que sigue siendo el pupilo de gente como Rubio, ya veteranos en la mitad de la cancha, sabe desenvolverse bien en su posición, hace fluir la posesión y controla muy bien los tiempos. En resumen, la situación no es fácil, una gran duda que debe ser resuelta antes de que acabe el período de fichajes invernales.

En materia de extremos, Bergdich, Rama y Omar ocupan la banda izquierda y Ebert, Larsson, Rama e incluso Alcatraz ocupan el carril diestro. De primeras no parece que haga falta fichar ningún operativo más, sin embargo, la zurda es la que más pide socorro. Bergdich tiene esa potencia y esa velocidad que se piden a un carrilero, sin embargo, su técnica es muy vasta; Omar no muestra interés y pese a que cuenta con la confianza del técnico, no aprovecha las oportunidades que le brinda, y, por último, Rama está lesionado.

El Betis está buscando una cesión para Cedrick, incorporado en el mercado de verano por la significativa cantidad de 1,20 euros. Su nombre ya sonó hace tiempo cuando el jugador militaba en el Numancia y era el que más despuntaba de la plantilla soriana, sin embargo, el Valladolid no se sintió interesado en él. Ahora, según futboldesdemallorca.com, el de Kinshasa es pretendido por Mallorca, Valladolid, Zaragoza, Osasuna y Rayo Vallecano y, sin lugar a dudas, mejoraría con creces lo que hoy tiene el Valladolid en banda izquierda.

Foto de Cedrick

En banda derecha, Ebert sigue lesionado, Larsson tiene molestias y el albano kosovar Valdet Rama también está entre algodones, por lo que Omar tuvo que ocupar frente al Granada una banda que no era la suya. Un nuevo fichaje no sería necesario si es que el alemán Patrick Ebert sigue en la disciplina albivioleta, y si no lo hiciera, Daniel Larsson supone un buen sustituto, como viene demostrándolo en estos últimos partidos.

4. La delantera: la última baza para ganar la Guerra

En lo referente a la delantera poco hay que decir, Javi Guerra es el cuarto goleador de La Liga y máximo artillero nacional, por lo que las oportunidades que tienen Manucho y Osorio son prácticamente nulas. Según centraldeportiva.com, el angoleño podría estar cerca de firmar por el Querétaro de México pero parece que las negociaciones se han enfriado o el rumor era un embuste ya que el propio club ha desmentido ningún interés por fichar al delantero. El Real Valladolid se ahorraría su alta ficha como ya hiciera con Alberto Bueno, triunfando en Vallecas, por cierto. Con Humberto Osorio como baja y dando una pobre imagen, Manucho será el delantero suplente y gozará de más minutos que al principio de temporada.

Fuente de las imágenes: lookfordiagnosis.com, ajax.nl y estadiodeportivo.com