Los porteros: esa gente. Los guardamentas tienen fama de tipos peculiares, algo comprensible ante la magna responsabilidad que acumulan en sus guantes, pues son el último eslabón en la cadena de responsables de que la pelota no acabe en gol en contra.
Que se lo digan a los tres equipos, por no decir cuatro, cuyos respectivos porteros podrían bailar de ciudad para ir de una a otra en función de lo que depare el destino. Una de ellas es Madrid, la otra Vila-real, la tercera es Valladolid y la última, si bien es la que dictará sentencia, Londres. Seamos más específicos. Atlético de Madrid, Villarreal, Real Valladolid y Chelsea tienen en sus manos un posible baile cuando acabe esta temporada.
Courtois tiene la llave
¿Y qué significa esto? Que se lo digan al Atleti. Los colchoneros tienen en sus filas a Thibaut Courtois, en calidad de cedido por los londinenses. Blanco y en botella: si Mourinho tiene a bien, el Chelsea podrá repescar a este portero para que haga competencia directa a Cech. No tendrían que pagar nada más que su sueldo ya que no existiría traspaso ninguno. Sin embargo, la aparente sencillez de esta operación se está comenzando a convertir en culebrón. De hecho, es probable que acabe siéndolo con todas las de la ley.
Si Mourinho tiene a bien, el Chelsea podrá repescar a Courtois
El Calderón no quiere que el belga abandone ese vestuario. Tras muchos años vagando a la deriva por fin han conseguido ocupar un lugar elevado en el balompié europeo y para afianzarse en él e incluso seguir creciendo es menester tener a los mejores hombres, y Courtois es uno de ellos. No solo es un portero con grandes cualidades, puesto que su juventud y las peculiaridades de la posición hacen prever que no tardará en ser, si no lo es ya, en uno de los grandes guardametas de los próximos años.
Pero 'Tibo' es consciente de que necesita minutos para seguir creciendo, y estos, por mucho que Mou insista, podrían verse limitados si ha de competir con Petr Cech por ser el goalkeeper del Chelsea. La opinión del belga será fundamental para el devenir no solo de estos dos equipos, sino de los otros dos que entran en liza. Para explicar los movimientos, supondremos que finalmente Courtois abandona Madrid y recala en Londres.
Los principales afectados serían los de Simeone, que necesitarían a un hombre de calidad y a poder ser futuro para defender los tres palos del Vicente Calderón. Es probable que opten por fichar a algún cancerbero de gran nivel, si bien tienen una opción en El Madrigal: el palentino Sergio Asenjo. El castellano es propiedad de los colchoneros pero se encuentra en el cuadro amarillo para coger esos minutos de los que se ha visto privado a orillas del Manzanares. Quién sabe si como titular o como suplente, a buen seguro este hombre acabaría en la capital para suplir a Thibaut en el ya mencionado supuesto de que este haga el petate a Reino Unido. Más aún cuando el guardameta belga no podría quedarse un año más como cedido, ya que tres cursos son los máximos permitidos para que un club ceda a un jugador a otro. La única vía, sería un traspaso, con unas cantidades, que se presentan complicadas para los colchoneros.
Asenjo y Mariño cambiarían de estadio
La patata caliente de la portería sería entonces para su club actual, el Villarreal. Los de Castellón viven un momento dulce, tienen una estructura saneada y un combinado sólido que sin duda alguna va a pelear por la más alta posición posible dentro de las que conceden acceso a competiciones europeas. El Submarino amarillo tendría que sondear el panorama en busca de un arquero de confianza, y qué mejor que Diego Mariño.
Asenjo es el gran candidato a la puerta colchonera. (Foto: Carla Cortés | VAVEL).
En las últimas jornadas se ha rumoreado que el contrato de Asenjo con los castellonenses incluye un matiz por el cual si el de Palencia supera más de una cantidad concreta de partidos con dicha zamarra, pasaría a ser propiedad del Villarreal. La no oficialidad de esta información no permite sacar conclusiones claras, así que el tiempo dictará si Sergio sigue a las órdenes de Marcelino.
Su vínculo contractual estipula que por una cantidad poco más que irrisoria, menos del medio millón de euros, el campeón de Europa sub 21 volvería al Villarreal. Los partidos que Diego acumula a sus espaldas en Pucela, pues de hecho está siendo de los más destacados del conjunto dirigido por Juan Ignacio Martínez, son el aval para que pueda proteger la puerta de una escuadra con aspiraciones mucho más elevadas que las castellanas.
Desde fuera puede observarse que hoy en día todo el mundo se cubre las espaldas a través de tácticas como las vividas por Courtois, Asenjo y Mariño: el club a quien pertenecen los cede a uno un peldaño por debajo para asegurarse que tiene un rol protagonista y que en el futuro puedan repescarlo para que defienda la portería en la que tiempo atrás no tuvo sitio.
Si este baile de piezas, este juego de maletas, guantes y porterías, se desenvuelve en su curso lógico, lo más probable es que suceda este movimiento. Los caprichos del fútbol y las vueltas del mercado, no obstante, provocan que hasta que todo se haga oficial no se pueda asegurar nada ante el riesgo de que todo cambie en el último instante. Pero también podría darse lo contrario, si la cláusula que hace que Sergio Asenjo permanezca en Villarreal sea efectiva y el Atlético de Madrid logra la cantidad necesaria para realizar el desembolso por Courtois y hacerse con su propiedad. Todo cábalas, que el destino decididrá.
Fotos: VAVEL | Marca.