Carlos Peña compareció en zona mixta del José Zorrilla para valorar la situación actual del Real Valladolid. el lateral salmantino explicó que se encuentran en descenso por méritos propios, pero que deben pensar partido a partido, centrando sus miradas en el importante enfrentamiento ante el Málaga: “Por nuestros méritos el ánimo está bajo, evidentemente la puntuación que tenemos no es buena, pero los resultados esta jornada nos ha beneficiado. Estamos a tres puntos, con lo mal que lo estamos haciendo, solo estamos a un partido del descenso. Tenemos el partido del sábado, que es el más cercano e importante, precisamente contra el rival que marca el puesto de salvación. Hay que levantarse, solo pensar en ese como si fuera el último”.

“Hemos hablado de aspectos del otro día, ha sido un poco a nivel motivacional, a nivel de ánimos. Se nos escapó un partido importante, no pudimos conseguir la victoria. Aún así, con 22 puntos, estamos a tres del puesto que marca la salvación, está en nuestras manos, no podemos mirar atrás. Solo hay que pensar en los partidos que quedan, el próximo es el Málaga, hay que pensar en ese”, continuó.

Para Peña, uno de los problemas que está teniendo el equipo en las últimas jornadas son las jugadas de estrategia del rival, vía por la cual han llegado numerosos goles en contra: “Cuando estás en estas situaciones estás por algo, y además te viene todo en contra. Ellos llegan el otro día en una ocasión, en jugada de estrategia, que no estamos controlando en los últimos partidos, y nos marcan. Eso es lo que tenemos que evitar. El equipo intentó y propuso, sí que es cierto que no hubo muchas ocasiones, pero tuvimos la pelota y pudimos conseguir el empate. La segunda parte nos fuimos con la sensación de que se había jugado poco, ellos interrumpieron mucho el juego, sacaron un punto que para nosotros no es suficiente”.

Algo que deben corregir, según comentó el salmantino, es la mentalidad con la que saltan al campo. Ante Elche y Levante, la primera parte del Real Valladolid fue muy timorata, alejada del planteamiento que debe tener un equipo con urgencias: “Cuando estás en una situación complicada siempre hay dudas. El día del Villarreal el equipo estuvo replegado, aprovechamos la fortaleza defensiva para llevarnos la victoria. Sí es cierto que en el partido contra el Levante el equipo no salió con esa intención de ir a por el partido, aunque no tienes eso en la cabeza, pero el momento te lleva a esperar que pasa. Hemos podido salvar dos derrotes, estamos a tiempo, hay que ser optimistas y tener esperanzas. Ganando el sábado veríamos todo muy diferente”.

Sin embargo, no todo está perdido, pues de ganar el sábado revertirían la dinámica: “Hay que creer, trabajar desde la concentración y hacer bien las cosas. El fútbol son dinámicas, si ganas un partido te cambia la perspectiva de todo. Todo puede pasar, estamos en un momento anímico bajo, pero hay que pensar que el partido del sábado nos va la vida”.

“Es un momento delicado para todos, entrenador, jugadores, aficionados. Todo el que está ahí dentro intenta remar en una dirección, que el equipo se mantenga en Primera División. Está afectado como todos nosotros, pero mentalizado de que el sábado hay que sacar el partido”, añadió.

Para finalizar, asumió su culpabilidad en el tanto de Casadesús en pasado viernes, puesto que no atacó bien el cuero y por ello se vio superado: “Yo espero el balón abajo, quizás es más error mío que falta. Si ataco el balón, no le doy opción que se suba a mi espalda. Si es cierto que viene el balón muy tocado, es una jugada muy difícil de defender. Hay que darle mérito al rival también”.

Vídeo: Real Valladolid