El inicio de curso, en lo que a resultados se refiere, es realmente positivo para el Real Valladolid. En lo alto de la tabla desde el comienzo, los de Zorrilla son segundos, empatados con el líder, tras haber vencido cuatro encuentros, empatado otro y perdido el restante. Sin un juego brillante, que tan solo ha aparecido en diversos momentos de los partidos, especialmente en casa, los pupilos de Rubi marchan con paso firme hacia la candidatura real del ascenso.

La parcela defensiva funciona, pues en seis encuentros, ha encajado cinco goles. Cierto es que algunos de ellos podían haberse evitado, como el penalti del Racing o el tanto del Tenerife en el descuento. A pesar de ello, es el segundo equipo menos goleado de esta Liga Adelante, empatado con varios conjuntos más. No es de extrañar encontrar a Marc Valiente en el once ideal de la LFP  de septiembre, o a Jesús Rueda en el elaborado por VAVEL para este mismo periodo. Sin embargo, el toque del balón parado sigue presente, vía por la que han llegado la mayoría de goles en contra, y los cinco puntos perdidos hasta la fecha.

Siempre por delante

De lo que sí debe estar realmente satisfecho Rubi, es de la zona ofensiva de su equipo. Costó arrancar, los primeros dos tantos llegaron a en jugada de estrategia, pero la continuación ha sido positiva. Tantos en jugada, en contraataque y en saques de falta directos. Un ramillete diverso del que elegir, que muestran las opciones variadas que posee el catalán para atacar la portería rival. Posibilidades que se han visto limitadas con la baja de Roger para los próximos seis meses.

La hinchada de Zorrilla ha celebrado siempre, en sus tres citas, el primer gol del partido

Lo que sí es igual en los nueve goles conseguidos hasta la fecha por el Real Valladolid, es que el primero de ellos, en cada encuentro, ha sido el que ha abierto el marcador. Salvo el pinchazo en Lugo, el conjunto albivioleta siempre ha ido por delante en el electrónico, cuando este ha permutado el 0-0 inicial. En cuatro encuentros, finalizó con ventaja blanquivioleta, mientras que en El Molinón, el empate asturiano terminó llegando cerca del final. La Copa del Rey no fue menos, y los pucelanos estrenaron el marcador. 

Adelantarse en el marcador siempre es positivo, especialmente para el aspecto moral, ya que tener que remontar un resultado adverso, si se produce jornada tras jornadas, termina atacando la mentalidad de los jugadores, que no ven premiado su esfuerzo sobre el campo. Golpear primero es una característica de un equipo ganador, de un conjunto que busca el ascenso desde la jornada inicial, sin un gran juego, pero con resultados palpables. El primer objetivo, que es ganar, para después crecer, está conseguido. Resta el buen juego, y mejorar detalles. Rubi ha logrado comenzar con buen pie esta Liga Adelante. Golpear primero es conseguir puntos, como se ha mostrado. Poco a poco, el Real Valladolid irá ganando en otros aspectos, para ir sumando puntos y opciones a los dos primeros puestos de la tabla, en el ansiado y deseado retorno a Primera División.