Empate entre el Real Valladolid Promesas y el CD Guijuelo en un encuentro, correspondiente a la tercera jornada, en plena festividad a orillas del Pisuerga. Sin goles, los pucelanos volvieron a sumar un punto, el tercero de la temporada, para un total de tres, en el regreso de Rubén de la Barrera a los Anexos, con su Guijuelo más jamonero. Rubén Albés, ante la prueba de fuego que era este partido, decidió dar continuidad al bloque que está dejando buenas sensaciones, pero tiene ese problema con el gol. El gallego, de inicio, planteó una vez más el 4-4-2 con dos delanteros con mucha movilidad, y dos bandas con libertad para percutir por cualquier parte del campo. Con Caye Quintana y Dani Vega, para intentar superar a Ramiro, viejo conocido del filial pucelano, el Promesas comenzó un partido en el que pudo dominar, lo pasó mal en algunos momentos y creó bastante peligro, especialmente a balón parado y con centros laterales.
Falta de gol
Por tercera jornada consecutiva, el Promesas fue el vencedor a los puntos, pero en el fútbol lo que cuenta son los goles, y no los méritos. Y goles, no hubo. Se quedó cerca, eso sí, el conjunto de Rubén Albés. Y en varias ocasiones. Pero el destino, la suerte o el azar no se están aliando con los albivioletas, y siempre surge un impedimento de última hora que imposibilita el tanto pucelano. Toni, el más activo, una vez más, sintió ese sinsabor de quedarse a las puertas del primer gol de la temporada. El palo derecho de Kike Royo escupió un fuerte disparo cruzado desde el pico del área, cuanto ya se cantaba el gol en las gradas de los Anexos durante el segundo tiempo.
También en la segunda mitad, el arquero chacinero se puso el mono de trabajo y despejó una fuerte volea de Dani Espinar, algo centrada, pero con muchos jugadores por delante para reaccionar. Antes, durante los primeros 45 minutos, el Promesas dominó dentro de la igualdad, sin grandes ocasiones, pero teniendo los mejores acercamientos a portería rival. Ángel, a la salida de un córner, pudo cabecear en el área, pero se encontró con un enemigo inesperado: Cristian y su espalda. El cuero golpeó en su compañero de defensa, y la zaga visitante pudo eliminar el peligro.
El Promesas se las ha visto con tres de los 'cocos' del grupo 1 y ha salido invicto
En lo que se refiere al Guijuelo, no contó con grandes ocasiones de gol, pero lo que sí tuvo fue una de las más peligrosas y que más cerca se quedaron. Tuvo que aparecer Ángel, bajo palos, para impedir el tanto de Luque, en lo que hubiera sido un palo muy duro para los de Rubén Albés, y para Dani Hernández, que se vio superado en esa acción de un encuentro en el que estuvo muy seguro, demostrando que está capacitado para sustituir a Julio cuando sea necesario. En definitiva, pocas ocasiones, pero que pudieron dejar algún que otro gol que se hace necesario ya en el Promesas.
Así pues, el Promesas continúa invicto, después de enfrentarse a tres de los equipos que se presentan como aspirantes a todo en el grupo 1. Sensaciones positivas, por esta razón, en defensa, ya que el no recibir goles siempre es destacable, más aún para un filial al que el curso pasado le faltó algo de seguridad en la parcela defensiva. Sin embargo, la falta de gol, después de tres encuentros, puede considerarse ya un problema a solucionar cuanto antes. Por su parte, el Guijuelo tampoco conoce la derrota, y sigue aupándose a la zona privilegiada de la tabla, en busca del deseado playoff.