Los pupilos de Miguel Ángel Portugal se desplazan este fin de semana a tierras andaluzas para medirse a la UD Almería en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, una cita importante para ambos conjuntos con la intención de salir de la complicada situación que atraviesan ahora mismo en la Liga Adelante. El Pucela se encuentra decimosexto con 12 puntos, con la moral algo reforzada tras el triunfo del domingo anterior en la capital de Castilla contra el Mirandés por dos tantos a uno. El cuadro albivioleta está a cuatro puntos de la zona de playoff, si bien es cierto que los puestos de descenso acechan peligrosamente al club presidido por Carlos Suárez, que únicamente está dos puntos por encima de adentrarse en el infierno de la tabla del torneo.
Por su parte, los rojiblancos están viviendo momentos realmente difíciles al ocupar el farolillo rojo de la clasificación en la competición de la regularidad en la Segunda División española. Todo el mundo pensaba que el Almería era un firme candidato a pelear por el ascenso a la Liga BBVA, al igual que el Real Valladolid, aunque no cabe duda de que la temporada es muy larga y ambos equipos acabarán revirtiendo la dinámica negativa que están afrontando en la actualidad en el campeonato doméstico. La parroquia andaluza tiene fe ciega en el cuerpo técnico y sus jugadores, pero es muy consciente de que la mejoría debe llegar lo antes posible para no alejarse en demasía de la zona tranquila de la tabla liguera.
Hay muchos ejemplos que invitan al optimismo. El más claro es el que está viviendo este curso futbolístico un equipo de la talla de Osasuna, que ha superado el bache vivido a lo largo de la campaña pasada para realizar un completo lavado de imagen y atravesar una tesitura completamente distinta a la de los hombres de Joan Carrillo. Los navarros, que a punto estuvieron de descender a Segunda B la temporada anterior, están en lo más alto de la clasificación de la Liga Adelante, principalmente porque han sido capaces de dar con la tecla y corregir los errores cometidos durante los dos últimos años, dos aciagas aventuras que provocaron el abandono del Olimpo del deporte rey a nivel nacional y una sufrida permanencia en la división de plata del balompié en España.
No obstante, el encuentro entre almerienses y pucelanos va a estar marcado por el regreso de dos viejos conocidos de la familia rojiblanca, dos jugadores que en su día defendieron los colores y el honor del plantel dirigido a día de hoy por Carrillo. Está claro que ambos llegan en un momento complicado, tanto para su club actual (Pucela) como para la que fuera su casa (Almería), aunque se prevé que la afición local les brinde un buen homenaje, siempre desde el respeto y la admiración, por los servicios prestados en su momento a un equipo que también tuvo la fortuna de pasearse por algunos de los campos más emblemáticos del panorama futbolístico nacional y mundial.
La muralla uruguaya
El primero de estos dos jugadores de los que estamos hablando es Marcelo Silva, quien llegó a orillas del Pisuerga el pasado mercado estival con la carta de libertad debajo del brazo, una vez que finalizó su relación contractual con la UD Las Palmas. Hubo muchos aficionados del conjunto canario que lamentaron enormemente la marcha del central sudamericano del equipo dirigido en aquel momento por Paco Herrera, técnico que fue destituido hace poco por los malos resultados de los amarillos en Primera. Esto ha provocado que Quique Setién, que también sonó con fuerza para reemplazar a Gaizka Garitano, haya sido el elegido para ocupar el vacío que el que fuera técnico de Celta y Zaragoza, entre otros, había dejado en el banquillo de los insulares.
Marcelo Silva formó parte de la UD Almería durante cuatro campañas
Volviendo a lo que verdaderamente nos compete, conviene destacar que Marcelo Silva formó parte de la UD Almería durante cuatro campañas, dos de ellas en Primera División y las dos restantes en la categoría de plata del balompié nacional. El uruguayo desembarcó en el sur de España en el curso 2010/11, temporada en la que jugó con los andaluces 21 encuentros del campeonato doméstico en la Liga BBVA, todos ellos como titular, 18 de los cuales los disputó de forma completa sin ser sustituido. 1.843 minutos jugados, tres cartulinas amarillas y un gol fueron algunos de los números del central durante su primer año en tierras almerienses.
Por increíble que parezca, Marcelo no contó con la confianza del cuerpo técnico del Almería para la siguiente campaña, que además iba a ser en Segunda tras el duro descenso consumado en el curso anterior, por lo que fue cedido al Peñarol de su país natal para recuperar parte de la ilusión perdida por el camino que estaba cuajando en la expedición rojiblanca. La campaña 2012/13, nuevamente en la Liga Adelante, iba a ser más próspera tanto para el uruguayo como para los andaluces, puesto que iba a suponer el regreso a Primera de los almerienses después de completar un óptimo curso futbolístico, el cual se iba a coronar por la vía de la promoción de ascenso en la final de dicho playoff frente al Girona encabezado por Rubi.
Marcelo Silva se vistió de corto en un total de 20 encuentros en la competición de la regularidad en Segunda, 19 de ellos como titular y 17 de manera íntegra, con unas estadísticas que volvían a parecerse a las de su debut en el sur de España: 1.679 minutos, cuatro tarjetas amarillas, una cartulina roja y un gol resumen perfectamente el bagaje del defensor nacido en Fray Bentos durante su tercera campaña en el Almería. Aun así, la vuelta a la Liga BBVA de los andaluces no estuvo acompañada por la confirmación de Marcelo al frente de la zaga rojiblanca, ya que ejerció un rol secundario y se pasó más tiempo en el banquillo que en el campo en su cuarta y definitiva temporada vistiendo la elástica a rayas rojas y blancas.
El acróbata soriano
Nuestro segundo protagonista es Rodri Ríos, un hombre que puede catalogarse como un auténtico trotamundos, al más puro estilo de Zlatan Ibrahimovic, cada uno a su nivel, claro está. El jugador nacido en Soria, pero criado en la localidad sevillana de Dos Hermanas, militó en las categorías inferiores del Sevilla a lo largo de varios años, llegando incluso a debutar con el primer equipo hispalense, lo que en el curso 2011/12 le valió su fichaje por uno de los planteles más poderosos del panorama deportivo internacional: el FC Barcelona.
Aquí es donde empieza la auténtica travesía viajera del actual '9' del Real Valladolid, puesto que después de un buen año en el filial azulgrana, pasó cedido por Sheffield Wednesday y Real Zaragoza antes de arribar a tierras almerienses para jugar con la elástica rojiblanca. Su estancia en la UD Almería duraría un solo curso futbolístico, el 2013/14, donde militó en calidad de cedido por parte del Barça para que siguiera acumulando experiencia y aumentara su progresión en el mundo del deporte rey. 27 partidos disputados, 21 de los mismos como titular, 1.892 minutos completados, ocho cartulinas amarillas y sendos goles fueron los números más destacados de Rodri en su etapa en el club entrenado en la actualidad por Joan Carrillo.
Sin embargo, hay una acción y un partido en concreto que ni almerienses ni pucelanos podrán olvidar jamás, dado que tuvo a Rodri Ríos como principal protagonista de la escena en cuestión. El sábado 2 de noviembre de 2013, a las 18:00 horas, Almería y Pucela se vieron las caras en el mismo escenario donde se enfrentarán el próximo domingo, el Estadio de los Juegos Mediterráneos, en una cita correspondiente a la duodécima jornada de la competición en la Liga BBVA. Ambos equipos sabían que era un duelo entre rivales directos por la permanencia, debido a que rojiblancos y blanquivioletas estarían inmersos en la apretada lucha por lograr la salvación hasta el último instante de dicha campaña 2013/14.
Rodri fue el responsable de noquear al Real Valladolid en el choque disputado en Almería
Los almerienses acabarían llevándose el gato al agua, tanto en el envite en la CCAA de Andalucía como al final de la campaña, puesto que los de Francisco permanecieron un curso más en Primera, mientras que los de Juan Ignacio acabarían descendiendo en el partido definitivo de la temporada al perder por la mínima (0-1) contra el Granada en su feudo. Hay que recalcar que ninguno de los dos entrenadores continúa ya en su puesto, debido a que ahora son Carrillo y Portugal los que encabezan las naves almeriense y castellana, respectivamente. Por lo que alude a Rodri, fue el responsable de noquear al Real Valladolid en el choque disputado en Almería, un partido que acabó 1-0 merced a una diana del '9', en la que se sirvió de su mano para enviar el esférico directamente al fondo de las mallas de la portería defendida por Mariño.
Por tanto, Marcelo Silva y Rodri Ríos regresan al que fuera su hogar, ahora luciendo con orgullo y pasión la casaca albivioleta, aunque sin olvidar las múltiples experiencias y vivencias por las que pasaron en sus respectivas trayectorias en la UD Almería. Dos hombres que conocen estupendamente la plaza en la que deberán torear los pucelanos este fin de semana, un lugar del que nunca han salido victoriosos los jugadores que irán uniformados a rayas blancas y violetas, por lo que las hordas dirigidas por Miguel Ángel Portugal tienen una asignatura pendiente con la historia para tratar de lograr el primer triunfo del Pucela en el Estadio de los Juegos Mediterráneos. Sin ningún atisbo de duda, la aportación del uruguayo y el soriano será fundamental para que los vallisoletanos tengan opciones de llevarse los tres puntos en su visita a Almería.