Insulso empate en Santo Domingo

Llegaba el Real Valladolid a Santo Domingo con el objetivo de prolongar la buena dinámica que estaba exhibiendo en los últimos encuentros, especialmente después del meritorio triunfo del fin de semana anterior en el José Zorrilla frente al Córdoba. Los pucelanos guardaban un gran recuerdo del campo de los alfareros, debido a que fue en el sur de Madrid donde aquel tanto de Javi Guerra supuso el inicio de lo que se acabaría convirtiendo en el ascenso del cuadro castellano en 2012 a Primera por la vía del playoff.

Los primeros compases del encuentro estuvieron marcados por un juego algo atascado en el centro del campo, dado que Alcorcón y Pucela trataban de imponer su estilo, dominando para ello el control del esférico con el objetivo de pillar desprevenida a la zaga rival. No obstante, la primera gran ocasión llegaría al cuarto de hora de la contienda en territorio alfarero, momento en el que los de Muñiz botaron un saque de esquina que acabó con una intervención muy meritoria de Kepa. Pese a ello, la acción estaba invalidada por una falta previa sobre un futbolista albivioleta.

Por su parte, el cuadro dirigido por Miguel Ángel Portugal tuvo su primer acercamiento al área alcanzado prácticamente el ecuador del primer acto. Mojica, que parece haber recuperado la confianza del cuerpo técnico, realizó una buena galopada por el flanco izquierdo del ataque albivioleta, apuró la línea de fondo y envió el esférico a una zona que podía haber entrañado mucho peligro. Sin embargo, Dmitrovic estuvo muy seguro en todo momento y consiguió blocar el cuero según le llegó a sus dominios, por lo que pudo desbaratar el peligro en la acción ofensiva de los visitantes.

El partido siguió transcurriendo sin que Alcorcón y Real Valladolid fueran capaces de dar con la fórmula precisa para desarbolar el engranaje de su oponente, puesto que tanto alfareros como pucelanos contaban con una filosofía y estilo prácticamente similares a la hora de plantear el duelo en Santo Domingo. Mojica volvió a probar fortuna con una falta lateral, pero su disparo desde el perfil diestro, es decir, a pierna cambiada, fue perfectamente repelido por una zaga madrileña que se estaba mostrando casi inexpugnable durante la media hora inicial del envite.

Ligera superioridad pucelana

Poco a poco, daba la sensación de que el club presidido por Carlos Suárez se iba haciendo ligeramente con el dominio del duelo. Los pupilos de Portugal llevaron a cabo un magnífico contragolpe por el lado izquierdo, donde Mojica estaba muy activo. Sería Manu el que dispondría de la oportunidad de batir a Dmitrovic dentro del área, aunque el recorte del jienense fue intuido por el defensor del Alcorcón. Esto había impedido que el Pucela tomara ventaja en el partido, aunque el ambiente empezaba a notarse algo enrarecido en el feudo alfarero con motivo de que su equipo estaba encerrado atrás como consecuencia del buen hacer de los de blanco y violeta.

Los hombres de Muñiz no renunciaban a aproximarse a la portería custodiada por Kepa

Aun así, los hombres de Muñiz no renunciaban a aproximarse a la portería custodiada por un Kepa que está cuajando una gran temporada, donde demuestra partido tras partido una tremenda seguridad pese a su madurez. David Rodríguez, el máximo artillero de los alfareros, lo intentó en un lance con Juanpe dentro del área, una acción que acabó con cartulina amarilla para el delantero del Alcorcón por simular una pena máxima. Acto seguido, le tocaría a Tienza probar fortuna con un disparo desde fuera del área, aunque su golpeo se marchó muy desviado de la meta pucelana. También lo intentó Óscar Plano, pero su remate fue a parar directamente a las manos del arquero del Real Valladolid.

Tras la reanudación, el Alcorcón iba a disponer de una buena ocasión para romper la igualdad en el electrónico, si bien es cierto que Kepa estuvo bien colocado y atento en todo instante para repeler el lanzamiento de los alfareros a la banda. Los alfareros salieron decididos en la segunda mitad a recuperar el dominio perdido en el tramo final de los primeros 45 minutos, lo que propició una nueva llegada a las inmediaciones del área custodiada por el guardameta cedido por el Athletic Club de Bilbao. No obstante, David Rodríguez no se mostró tan certero como en él es habitual, un aspecto que permitió que la zaga albivioleta pudiera alejar el peligro.

La escuadra encabezada por Muñiz estaba desplegando una imagen totalmente opuesta a la que se había visto en la primera mitad, mientras que el Pucela no podía hacer otra cosas que defenderse del acoso y derribo (entre comillas) que los alfareros estaban desempeñando sobre su parcela en el campo. La situación para los de Portugal podía ser muy preocupante, especialmente si se recordaba lo sucedido en el primer duelo del nuevo año en Montilivi, justo cuando los castellanos hicieron un choque bastante pobre en el estadio del Girona que acabó en derrota por la mínima (1-0).

Savia nueva para el choque

El míster abulense decidió mover el banquillo a falta de media hora para finalizar el compromiso en Santo Domingo, por lo que apostó por retirar del césped a Manu del Moral para dar entrada a Rennella, el futbolista que se había incorporado durante el periodo invernal de fichajes procedente del Betis. Fuera como fuese, el cuadro blanquivioleta se sacudió un tanto la presión incesante efectuada por su oponente, una cuestión que posibilitó que Mojica se internara una vez más por el costado zurdo, la primera vez en la segunda parte. Su centro fue bastante bueno, aunque Juan Villar se encontraba en posición antirreglamentaria y su diana no pudo subir al marcador porque el trencilla decretó fuera de juego del onubense.

La segunda sustitución que realizó el técnico burgalés fue el ingreso al tapete verde de Roger por Rodri, donde había que destacar que el ex del Levante fue el héroe el pasado curso en Santo Domingo al darle los tres puntos al cuadro de Rubi. Poco después, casi en la siguiente jugada, el plantel madrileño hizo una estupenda internada por el perfil diestro de su parte ofensiva, donde un envío raso al área desde dicho sector concluyó con un remate de Máyor que no encontró los tres palos por muy poco. Seguía siendo mejor el Alcorcón en los segundos 45 minutos, pero no conseguía tener esa puntería necesaria para decantar la balanza a su favor.

Miguel Ángel Portugal quemó su último cartucho con la entrada de Borja

Después de haber dado la confianza a Rennella y Roger de salir en el segundo acto, Miguel Ángel Portugal quemó su último cartucho con la entrada de Borja en detrimento de Pedro Tiba, así que los tres cambios habían sido los tres futbolistas que habían fortalecido la plantilla vallisoletana en el mercado de fichajes en invierno. El valenciano intentó asociarse con Juan Villar por la banda diestra, aunque la defensa alfarera estuvo realmente seria y expeditiva, lo que hizo que los de Muñiz enviaran el cuero lejos de los dominios de un Dmitrovic que apenas había tenido que intervenir en el choque.

El encuentro estaba siendo muy tosco y plomizo, a pesar de los intentos del Alcorcón por romper la paridad del mismo con algún que otro acercamiento al área en el segundo acto. Los cambios realizados en las filas del Pucela parece que le dieron una bocanada de aire fresco a los castellanos, donde Borja le aportó la consistencia a la medular que tanto faltaba ante la ausencia por lesión del capitán Álvaro Rubio. Los pucelanos tuvieron una llegada de Roger por el flanco diestro, aunque su envío fue un poco deficiente. Y sería el '23' castellano el que gozaría de la última ocasión del envite, pero su cabezazo tras el centro de Mario Hermoso se perdió por poco, lo que originó el pitido final del trencilla y el reparto de puntos en Santo Domingo entre ambos clubes (0-0).

Puntuaciones del Real Valladolid