A las 19:00h del 25 de marzo de 2013 el Estadio Hermanos Antuña acogía el primer enfrentamiento en la historia entre un equipo del concejo de Mieres ante otro de la ciudad de Cartagena.

La actitud vivida por ambos equipos en los días previos a dicho encuentro había sido radicalmente opuesta. Los locales, recién ascendidos a la categoría de bronce, consideran ya suficiente premio haber quedado cuartos de su grupo y afrontaban el partido conocedores de no tener nada que perder. Los visitantes, no obstante, debido a su reciente pasado en la Liga Adelante se marcaron como objetivo, no solo alcanzar los playoff, sino además conseguirlo como líderes. Al haberse quedado a dos puntos de dicho objetivo, el dueño del equipo, Francisco Gómez, decidió destituir al entrenador, Pacheta, a favor de Jose Miguel Campos, quien se estrenaría como albinegro en este encuentro. La enorme decepción de ver como se les escapaba el liderato provocaba, en la afición del Cartagena, una zozobra y crispación que colaboró en dicho despido. En definitiva, esta tarde se enfrentaron dos equipos, de los cuales uno veía su situación como un premio, mientras el otro lo contemplaba como un castigo.

Campos sorprendió a propios y extraños con su primera alineación. Habiendo descartado para la convocatoria a Campins y Álvaro, el del Puerto de Mazarrón alineó un trivote (Arcas, Urzáiz y Segura) con un único punta, Florian. De esta forma, Urzáiz y Segura, los dos únicos jugadores de la plantilla que habían trabajado bajo las órdenes del míster previamente, aparecían en su primer once. Con esta alineación, Campos no dejaba ningún jugador de corte defensivo en el banquillo.

Víctor y Prosi, protagonistas de la primera parte

La primera ocasión de peligro la protagonizaron los albinegros (en esta ocasión de naranja) con un centro de Florian que se paseó por delante de una portería vacía sin encontrar rematador.

A pesar del dominio visitante inicial, el primer disparo del partido, producido en el minuto 11, corrió por cuenta de Prosi, aunque no supuso ningún problema para Víctor Ibáñez. A partir de ese momento, los locales fueron claros dominadores del partido, como evidencia los cuatro saques de esquina a favor que habían disputado por ninguno de sus rivales apenas cumplido el primer cuarto de hora de juego. El propio Prosi lanzó un lanzamiento de falta directo en la frontal del área, Víctor solo pudo despejarla, pero su defensa alejó el peligro. No mucho después, se repitieron los mismos protagonistas, pero esta vez, el disparo del ovetense se produjo desde el centro del campo.

La primera parte del encuentro siguió transcurriendo con claro dominio local, con algún peligro ocasional de los de la ciudad portuaria con algunos balones colgados al área. El más claro de todos, un centro de Diego Segura que, una vez superado a Javi Díaz, Nacho acertó a despejar a córner.

Llegado el minuto 46, un rechace de Víctor no es despejado por Urzáiz en la frontal del área. Prosi aprovecha este despiste para golpear la pelota. Mariano Sánchez desvió el esférico a córner, pero el trencilla mandó a los jugadores a vestuarios sin permitir que se efectuase el saque de esquina.

El Cartagena cambió de esquema, todo pero todo fue igual

Campos, cuyo equipo había terminado la primera parte sin realizar un disparo entre los tres palos, movió ficha en el descanso, dejando en el banquillo a Ramón Arcas (que ya había visto una cartulina) por Antonio Cañadas, abandonando así el trivote y recolocando a Diego Segura en la posición que había ocupado durante toda la temporada.

El guión de la segunda mitad comenzó siendo el mismo con el que acabó la primera parte. De hecho, hasta el minuto 60, los visitantes no hicieron su primer y único disparo entre los tres palos del encuentro. Este corrió por cuenta de Tonino y no acarreó ningún tipo de peligro. Poco antes, Javi Díaz había atajado un centro de Tonino que Florian se disponía a cabecear.

De la misma forma que hizo Prosi en la primera mitad, Javi Sánchez volvió a probar fortuna desde la distancia, provocando que nuevamente Víctor se convirtiera en el héroe de su equipo, atrapando el “trallazo” en dos tiempos.

El Caudal no dejó de intentarlo en ningún momento del partido, pero continuamente se topaban con una zaga defensiva y un guardameta de los albinegros que realizaron una excelente labor.

Embestida final de los visitantes

En los últimos 10 minutos de partido, saltó al campo Nicolás Raimondi. El uruguayo volvía tras recaer de su lesión producida en la jornada 34, justo en su reaparición de otra lesión que le había tenido apartado de los terrenos de juego en casi toda la segunda vuelta.

En estos últimos minutos, el Cartagena trató de tirar de casta, pero sus balones colgados, destacando una jugada de Miguel Ángel Riau, que recorrió toda la banda izquierda del campo, no encontraban nunca rematador.

El resultado favorece más al Caudal

El resultado final, empate sin goles, favorece más al cuadro local, cuya afición estará de seguro orgullosa de cómo han puesto contra las cuerdas a un “gallito” de la categoría.

El partido de vuelta se celebrará el domingo, 2 de junio, a las 19:00 de la tarde en el Municipal Cartagonova, dicho horario, de seguro, provocará que pocos aficionados asturianos puedan viajar con el equipo, pero la moral con la que los jugadores afrontarán el mismo, sabedores de que cualquier empate con goles les permitirá pasar de eliminatoria, es incuestionable.

El Cartagena, por el contrario, tendrá que rendir cuentas ante una afición que se ha mostrado muy exigente a lo largo de la temporada y que, está decepcionada tanto con la reciente decisión del dueño del equipo, como con el juego mostrado en el actual partido.

No hay que olvidarse que al EFESE ahora no le vale otra cosa que no sea la victoria, mientras que cualquier empate con goles clarificaría al conjunto asturiano.