El Real Murcia es un equipo nuevo. Tras el mal arranque de liga, los dos encuentros como local habían dejado las dos primeras victorias de la temporada, permitiendo al equipo respirar aire limpio. Dos victorias muy importantes, llegadas además tras dos choques convincentes, que tenían al equipo con la moral por las nubes en su visita a la localidad onubense de Lepe. Allí, esperaba un San Roque de Lepe invicto, al que no habían sido capaces de derrotar equipos como Marbella o La Hoya, verdugos granas en el inicio liguero.
Feo escenario
El encuentro arrancó bien por parte del Real Murcia. En un campo de pequeñas dimensiones y ante un rival muy pegajoso, los de Aira no rehuyeron en ningún momento las condiciones adversas y se lanzaron a por el partido. Un partido intenso, que desde el comienzo dejó entrever que se trataría del clásico choque de segunda B: defensas muy encima del rival, juego aéreo y escaso fútbol trenzado. Con estas condiciones, el Murcia dominó los primeros instantes de juego. Se hizo con la pelota, se plantó en campo rival y trató de generar por los costados.
Los aurinegros se hicieron con la manija del encuentro, maniatando al MurciaPor su parte, el San Roque desplegó un plan de juego tan directo, como efectivo en los primeros compases. Y es que, cuando apenas transcurrían 12 minutos de partido, un saque de esquina forzado por el camerunés Elie y tocado en el primer palo, cayó a Chaco, quien anotó el primero de la tarde para los locales. Pese al buen inicio, el Real Murcia se encontraba con un gol en contra muy doloroso. Un gol que, además, cambiaría la dinámica del encuentro, espoleando a un San Roque de menos a más.
Con un juego muy directo, donde la figura de Elie se erigió en gran azote grana, los aurinegros se hicieron con la manija del encuentro, maniatando al Murcia. Se jugaba a lo que el San Roque quería, y los de Aira sufrieron mucho para reponerse. Mucho balón parado, poco fútbol y excesiva brega. El cuadro grana se sentía muy incómodo, pero entonces llegó uno de los momentos clave del partido. Al filo del descanso, Chavero tocó de testa un saque de banda desde la frontal, Sergio García apareció a la espalda del lateral y remató contra la meta de Bocanegra. Gol y empate del Real Murcia justo antes del descanso.
Actitud ganadora
Tras un primer tiempo muy gris en cuanto a juego, el segundo arrancó de un modo totalmente opuesto. El tanto anterior había alterado a ambos equipos, que saltaron al verde más ofensivos y con mayor mordiente arriba. Así, disputados solo siete minutos del segundo periodo, se anotarían dos tantos más, uno por cada equipo. El primero el golpear fue el Real Murcia, en un contragolpe lanzado por Sergio García, conducido por Germán y finalizado por Carlos Álvarez a puerta vacía. Tres minutos después, los aurinegros empatarían el choque, al transformar Lolo un penalti de Sobregrau sobre el escurridizo Elie, el mejor de los de Lepe.
Carlos, Sergio García y Chavero empezaron a crecer y conectaron a los granas al encuentroEl fulgurante inicio no alteró el signo del marcador, pero sí el del encuentro, que por momentos se convirtió en un pequeño correcalles. Un correcalles donde los pimentoneros harían bueno su potencial ofensivo, frente a un San Roque cada vez más mermado físicamente. Carlos Álvarez, Sergio García y Chavero empezaron a crecer, y ayudados por las entradas de Isi y Fran Moreno, conectaron a los granas al encuentro. A Juanito, entrenador del San Roque, no le gustaba nada lo que estaba viendo, y decidió retirar del terreno de juego a un cansado Elie, dando entrada a un hombre de contención como Fragoso.
El cambio dio aire al San Roque, que sin embargo siguió a merced de un Real Murcia en pleno auge. Llegados los últimos 15 minutos de partido, y tras un breve periodo de descanso, el Murcia lanzó su última ondanada y el tanto acabó por llegar. En el minuto 77, Chavero recibió dentro de área, aguantó con mucha clase el balón y terminó cediendo atrás a Fran Moreno, que adelantó a los pimentoneros. Después de mucho remar, el Murcia se adelantaba a poco del final y con un San Roque fracturado por el agotamiento. El tiempo pasó, pero el Real Murcia no dio su brazo a torcer, logrando incluso aumentar diferencias con un penalti cometido sobre Fran Moreno y transformado por Chavero.
Victoria final por 2-4 de un gran Murcia. En un encuentro muy adverso, ante un rival muy duro, los chicos de Aira supieron competir en todas las fases del encuentro, haciendo prevalecer su teórica superioridad en momentos clave. Quizá no fue el día más brillante de los pimentoneros, pero sí la victoria más valioso, pues en la tarde de Lepe el Real Murcia demostró estar listo para competir sea cuál sea la circunstancia. Con trabajo y actitud ganadora, los granas ya suman tres victorias consecutivas, posicionándose en la octava plaza. Por su parte, el San Roque vio volar su imbatibilidad, y termina la jornada cercano a los puestos bajos de la tabla.