Beto debutó en un partido de Copa del Rey ante el frente al que ha sido su último rival, el Atlético de Madrid, el 31 de Enero de 2013, partido que perdió el Sevilla por 2-1. Pese a a la derrota, el luso comentó que había sentido algo especial por el Sevilla, que "es parte de mi vida pasa lo que pase. El club me ha recibido como ninguno". Y ontó una anécdota de ese primer partido: Miré el escudo y le pedí que me protegiera porque yo lo iba a proteger siempre".
Equilibrio
Tras repasar sus primeros días como sevillista, el guardameta se en la nueva temporada, donde no comenzaron bien. "Hemos sufrido muchos goles porque el equipo se tiraba para delante, queríamos ganar, marcar goles y había veces que nos olvidábamos de defender", citó. Con el paso de las jornadas se fue solucionando este aspecto: "Hemos trabajado mucho y hemos encontrado un equilibrio bueno entre ataque y defensa".
La racha: 8 partidos sin perder
Algo ha cambiado en este Sevilla, que lleva sin perder desde el partido frente al Celta, precisamente por un error de Beto: Fue un error, pero había que mirar hacia delante". Después, la racha se ha alargado hasta las 8 jornadas, destacando las victorias ante el Betis y el Villarreal, y el empate ante el Atlético. Este equipo puede pelear por puntos donde sea, aseveró. Y desde la humildad, recordó que "para nosotros el Sevilla es el mejor equipo del mundo". Además, fue claro al decir que "contra un Barcelona o Real Madrid no somos favoritos pero nosotros sentimos, dentro del campo, que podemos pelear por puntos".
El vestuario
Beto también tuvo palabras para sus defensas de los que dijo que "son guerreros, son agresivos y son fuertes", destacando al argentino Fazio, del que comentó que “no gira la cara nunca a la lucha”. Unos buenos resultados siempre son fruto de un buen ambiente en el vestuario, aspecto que destacó el meta, para concluir admitiendo que “hay un vestuario muy sano donde se puede hablar de los problemas donde, si es necesarios, nos reunimos y decimos las cosas como son”.