El Sevilla no ganaba en Vallecas desde la 2002-2003 y además llegaba después de seis partidos sin conocer la victoria, tres derrotas y tres empates, por lo que necesitaba sacar un buen resultado de Vallecas. Pero los madrileños no estaban por la labor cuando buscan salir de los puestos de descenso en su particular lucha por la salvación y necesitan sumar victorias para poder conseguirlo. El club, con el lema “Juntos podemos”, buscaba a través de las redes sociales un llamamiento a la afición para seguir apoyando al equipo en busca de la permanencia.

Baile de oportunidades

El conjunto andaluz, con Alberto Moreno jugando en un puesto más adelantado de lo habitual, comenzó con más oportunidades gracias a Rakitic, que creó las jugadas de mayor peligro. Todo lo contrario le sucedió al Rayo, que le costaba sacar la pelota jugada para crear ocasiones que hicieran peligrar el área de Beto, apenas un par de oportunidades en la primera mitad. A los 20 minutos de partido no había sucedido nada reseñable durante el encuentro.

El peligro visitante llegó como casi siempre a balón parado y gracias a Rakitic.

El peligro por parte visitante llegaba, como viene siendo habitual, gracias a jugadas a balón parado, especialmente en los saques de esquina, con una media de uno cada cinco minutos. Hacia la media hora de partido, la posesión se empezó a igualar un poco más y el Rayo Vallecano, tras quitarse un poco la presión rival, empezó a controlar algo más el balón.

En el 38’ el árbitro anuló un gol al Sevilla por fuera de juego que había rematado Jairo. Los minutos finales de la primera mitad fueron los mejores, ya que ninguno de los dos equipos tenía el partido totalmente controlado pero se vieron más opciones en ambas áreas, acciones precipitadas quizá, por parte de los locales. Una de Lass que finalmente detuvo Beto en el 39’y un lanzamiento de falta lanzado por Rakitic, fueron las mejores oportunidades ya en los minutos finales de los primeros 45 minutos.

Gol y a defender

La segunda parte comenzó igual que concluyó la primera, con lanzamientos de Lass y Rakitic que no tuvieron excesivo peligro, ni en esas jugadas concretas ni en general en los primeros minutos de juego en general.

Pero no tardó demasiado en animarse un poco el partido. Una jugada del Sevilla con Rakitic como protagonista y otra con Jonathan Viera a los pocos minutos, pusieron mayor emoción al encuentro. Finalmente fue el Sevilla, con gol de Coke, como no podía ser de otra manera, tras asistencia de Rakitic y en jugada de estrategia. Gol de un viejo conocido de la afición vallecana. El partido se rompió un poco tras el tanto anotado y los de Emery empezaron a tener mayor peligro.

Iborra terminó en la calle tras ver una segunda amarilla por perder tiempo en el cambio.

Tras esos primeros instantes de desconcierto para los locales tras encajar el gol y con claro control hispalense, el partido volvió a dormirse y el Rayo volvió a meterse poco a poco, creando de nuevo más oportunidades. El Sevilla fue reculando y esto facilitó esas jugadas de peligro vallecano.

A pesar de que el Rayo tuvo mayor número de oportunidades, el Sevilla tuvo bastante controlado el partido y de hecho, volvió a tener una clara oportunidad clara, de nuevo en las botas de Rakitic. Daba la sensación de que podía llegar más el segundo sevillista que el gol del empate.

A diez minutos para el final Larrivey estrelló un balón al palo en la que fue una de las mejores ocasiones para los locales, tras un fallo en defensa de Nico Pareja. Y tras esa jugada, el árbitro señaló amarilla a Iborra que terminó en la calle tras ver la segunda tarjeta, en este caso, por perder tiempo cuando iba a ser sustituido por Unai Emery.

Con uno más, los de Paco Jémez se volcaron al ataque y crearon bastantes oportunidades, pero a pesar de ello, el Sevilla supo cerrar bien atrás y las opciones, muchas de ellas precipitadas, no acabaron en gol. El partido concluyó con el Sevilla cerrado atrás y el Rayo quemando todas sus naves en busca de un empate que no llegó, incluso con el portero Rubén que subió a rematar un córner en el último minuto de la última jugada del partido.

Finalmente el Sevilla volvió a conseguir la victoria, a pesar de seguir sin jugar bien, pero suma tres puntos después de seis jornadas sin ganar. El Rayo por su parte sigue hundido en la parte baja de la tabla y necesitará hacer algo más para intentar revertir la situación.