Con Sampaoli a la espera de dirigir a los hispalenses, Emery se ve en la paradoja de no tener equipo asegurado para la próxima temporada, ya que el chileno va a ser casi con toda seguridad el técnico del Sevilla y los parisinos todavía no han pagado el finiquito a Blanc para que el vasco pueda tomar las riendas del que se presupone será su próximo equipo. La última noticia que se sabe es que el actual entrenador se encuentra el Qatar a la espera de firmar su futuro contrato que ya lleva dos semanas en el aire.
La mayor preocupación de Unai es que a partir del próximo 1 de Julio su valor pasará de dos millones a seis, lo que complicaría aún más su fichaje por el equipo de la capital francesa. Las tornas han cambiado para él pues ha pasado de dar dolores de cabeza a toda la entidad y a los aficionados a tenerlos él mismo.
De esta forma el Sevilla ya tiene más claro su futuro más próximo, mientras que Emery se puede ver sin equipo y con todos los banquillos de equipos Champions ocupados. Nasser Al-Khelaïfi, propietario del París Saint-Germain, no le ha dado tras más de 10 días de espera ninguna noticia a Unai Emery, que presuntamente lo tiene todo cerrado con el conjunto parisino desde hace varios días, pero que sigue sin tener nada asegurado. Son 22 millones los que separan al equipo y al entrenador, que pueden llegar a ser 26. La problemática viene cuando el dueño del PSG, Al-Khelaïfi considera que a Blanc sólo le corresponden diez millones en base a sus propios argumentos.
El presidente José Castro ha sabido llevar esta situación dándole una vuelta inesperada que pocos preveían al saltar la noticia de la marcha del técnico por segundo año consecutivo a espaldas del club. Al igual que hizo con el boom de Monchi, el cual está trabajando al 100% para los intereses del Sevilla hasta la fecha tras la que podría haber sido una vergonzosa salida tras sus grandes éxitos en el equipo más laureado del sur de España.
Mientras tanto Sampaoli está en Chile, no antes sin haber dejado claras las instrucciones pertinentes al club sobre su forma de trabajar y los puestos a reforzar en el equipo. Tanto Castro como Monchi se encuentran el Sudamérica con el fin de fichar a un par de jugadores que ha pedido el ex seleccionador chileno.
Unai Emery acordó con el Sevilla en la negociación de su ampliación de contrato del pasado verano, un mes de margen para facilitar la marcha del técnico en el caso de que llegase una oferta de un gran club que le interesase al vasco, previo pago de una indemnización. Ya el año pasado el técnico vasco se reunió con el Nápoles a espaldas del club para hablar de un proyecto que finalmente no se aceptó, el club de Nervión amplió su vinculación hasta 2017. En este contrato se rebajó durante el mes de junio su cláusula de rescisión unilateral del contrato de seis millones a dos, regresando, a seis a partir del 1 de julio. Le quedan 12 días para aclarar su futuro.