Luis Hernández, lucha y corazón, honor y valentía, sudor por una camiseta. La temporada del central sportinguista no ha dejado indiferente a nadie, ni tan siquiera al mismísimo campeón de la Premier League, el Leicester City. El madrileño concluyó la temporada 2015/16 siendo el futbolista con más balones recuperados, un total de 418.

La metamorfosis que sufrió Luis fue espectacular, por no decir prácticamente increíble. Llegó a Gijón en busca de oportunidades en el filial del Real Sporting de Gijón, tras un tiempo bastante convulso en el Real Madrid. De la mano de Jose Ramón Sandoval, ascendió al primer equipo como lateral derecho, lugar en el que nunca cuajó. Con la llegada de Abelardo pasó a ocupar la posición de central junto a Bernardo, convirtiéndose en uno de los mejores centrales de Segunda y formando un cerrojo en la zona defensiva asturiana.

En su última campaña defendiendo la camiseta rojiblanca ha conseguido rendir a su mejor nivel, el cual lleva años demostrando. Todo inició con normalidad, él y Bernardo se complementaban a las mil maravillas y la defensa gijonesa no era ningún quebradero de cabeza para "el Pitu", pero todo era demasiado bonito para ser cierto... y el colombiano se lesionó de gravedad en El Madrigal, encuentro en el que los visitantes salieron derrotados. Parecía que la lesión del líder de la zaga sería un problema gravísimo para el Sporting, pero no fue así. La juventud y la inexperiencia no fueron impedimentos para que Meré se adaptara y rindiera al máximo nivel junto a Luis Hernández, el cual se hizo capitán total de la defensa.

En conclusión, el central madrileño ha aportado muchísimo al Real Sporting durante toda esta campaña, a pesar de que ha decidido hacer las maletas rumbo a la liga inglesa, propiciado en parte por sus idas y venidas con la directiva del club, ya por todos conocidas.