Tarde de calor y ambiente de fútbol la vivida en Pontevedra. Desde comienzos de la tarde las calles pontevedresas se llenaron de gente preparando la previa de un partido importante. Ambiente de lujo en Pasarón para el partido mas importante en 3 años con Norte y Tribuna rozando el lleno.
Dominio granate en los primeros minutos
El partido comenzó muy bien para los intereses granates. Los más optimistas ya se relamían pensando en la posibilidad de una machada como la del Granadilla en la eliminatoria anterior. El Pontevedra, muy bien plantado y con su intensidad y ritmo por bandera, dominaba el juego y las jugadas de peligro se iban sucediendo.
En el minuto 10 llegó la ocasión más clara del equipo local. Tubo puso un centro muy bueno desde la banda derecha y Pablo Carnero remató al larguero lo que parecía un gol cantado. Pocos minutos después, Tubo penetró con velocidad y regate dentro del área manchega y su disparo pegó en un defensor.
Fueron los mejores minutos de un Pontevedra que dominaba y se veía seguro y confiado. Pero cuando mejor estaban los locales, el Puertollano tuvo la primera ocasión. Minuto 23 de juego, Jose Manuel dejó un balón en el área a su compañero en la delantera Hugo para que el atacante fusilase a Edu y marcase el primero.
Tras el gol el Pontevedra no se arrugó y durante los siguientes 10 minutos, el partido volvió a su rimo habitual de dominio e intensidad granate. Fue entonces cuando los manchegos comenzaron su particular partido de pérdidas de tiempo y seguridad defensiva para dormir un encuentro que se les había puesto muy a favor. Los últimos minutos de la primera parte fueron de constantes imprecisiones fruto del cansancio y el calor de la tarde.
Segunda parte de pocas ocasiones
Tras el descanso el juego del Puertollano no cambió. El Pontevedra lo intentó con mas voluntad que acierto. Tan solo Fandiño, con un lanzamiento desde fuera del área inquietó un poco a Reguero. Los manchegos, serios atrás, esperaban la oportunidad de lanzar una contra que sentenciase el partido. Y esa contra llegó en el minuto 72, Jose Manuel centró para el goleador de los visitantes Rubén Gómez que bate por bajo a Edu.
Poco o nada por parte de los de casa tras el definitivo segundo gol del Puertollano. Manu Fernández dio entrada a Kevin Levis para buscar un gol que pusiera las cosas más fáciles a los suyos de cara a la vuelta pero para entonces el Puertollano ya estaba muy cómodo en el campo. Incluso pudieron hacer el tercero en una contra que marraron entre Chumillas e Iván Limón para lucimiento del portero granate, Edu.
Pablo Franco fue expulsado por lanzarse un balón al campo desde su banquillo
La nota negativa del partido llegó en el descuento cuando desde el banquillo visitante se envió un balón al campo, interrumpiendo una jugada desesperada de los granates para reducir distancias. La acción molestó, y mucho, a la grada pontevedresa que se deshizo en gritos e insultos hacia los de fuera. Finalmente la interrupción acabó con la expulsión del entrenador del Puertollano, Pablo Franco como responsable del banquillo del Puertollano.
En una semana el Pontevedra intentará la remontada en tierras manchegas. Será difícil, pero no imposible. En Pontevedra todavía escuece aquella remontada del Sevilla B hace años y aquel Pontevedra se trajo un 0-2 de Sevilla. Lo más positivo es que los de Manu Fernández no fueron inferiores en ningún momento al Puertollano.
Sala de Prensa
Pablo Franco acudía a rueda de prensa cariacontecido después del clima de tensión vivido a final del partido. El entrenador del Puertollano habló sobre lo sucedido: "No veo justo haber sido expulsado por algo de lo que no tengo la culpa, pero así lo especifica el reglamento cuando se lanza un balón desde el banquillo y el árbitro no puede identificar al culpable". Sin embargo, el míster destacó que en el mismo momento pidió perdón al árbitro porque condena este tipo de actos.
En relación al partido, Franco calificó el resultado como impresionante, aunque destacó que "la eliminatoria no está cerrada porque el Pontevedra es un equipazo”. Según el preparador, el equipo local hizo muy buen partido y pudo hacer algún gol, por lo que consideró que va a ser un equipo que en el Cerrú les va a competir y a poner las cosas muy complicadas.
Franco hizo un análisis de lo que fue el partido: “En el primer tiempo, el Pontevedra empujó mucho incluso pese al gol en contra. En la segunda parte les ha costado más, han recurrido al juego directo y nosotros hemos sabido controlarlo mejor. Así hemos tenido más alternativas”. También señaló que el primer gol fue muy importante para ellos, pero la clave estuvo en el segundo porque a partir de ahí se palpaba que si algo podía llegar, sería el posible 0-3.
Pablo Franco: "El Pontevedra te puede hacer cuatro goles en un buen día"
De cara al partido de vuelta, Franco hizo un llamamiento a su afición porque según él “el Pontevedra es un equipo muy bueno y puede hacer cuatro goles en un buen día”. El míster señaló que la eliminatoria está abierta y que su afición tiene que hacer un esfuerzo por acudir al campo. Mostró admiración por Pasarón y su afición: “Jugar en Pasarón es un gustazo ya que es un campo con mucha historia, gran ambiente y con un número tremendo de hinchas” y cree que Cerrú debe hacer lo mismo para ser una olla a presión.
Mientras, un Manu Fernández visiblemente disgustado por el resultado trató de ser optimista en la sala de prensa. El míster pontevedrés no quiso dar por resuelta la eliminatoria porque en palabras suyas, “igual que hoy se perdió, el siguiente partido se puede ganar”. Para el entrenador granate, su equipo hizo una fantástica primera parte en la que solo faltó acierto.
Manu Fernández: "El primer gol fue injusto y nos hizo mucho daño"
Así, la clave del partido estuvo en el primer gol, del que dijo que “Fue injusto y nos hizo mucho daño. Luego nos costó entrar en el partido porque por circunstancias externas nos desquiciamos”. En este sentido, el preparador señaló que el árbitro se mostró demasiado permisivo con el Puertollano aunque no influyó en el resultado.
Fernández destacó que el 0-2 terminó por sentenciar un choque en el que, por aquel momento, el Pontevedra trataba de empatar con demasiado juego directo. Sin embargo, el entrenador del Pontevedra no quiso calificar el resultado como injusto. En palabras de Manu “el Puertollano estuvo más acertado y supo manejar mejor las circunstancias. En el fútbol la justicia está sobrevalorada”.
Por otro lado, el míster afirmó que el vestuario estaba fastidiado por un resultado que los jugadores no merecían pero que desde el martes tratarán de trabajar para ganar en la vuelta. Por ello, pidió a la afición que crea en un equipo que, afirmó “va a salir a morir en el campo del Puertollano”.