Queda poco para que se dispute una nueva jornada de Liga Adelante tras la victoria en casa ante el Real Zaragoza, y con la moral alta, el asalto a El Sadar no se ve como un objetivo lejos del alcance de la plantilla rojiblanca.
En Almería dispondrá de una gran oportunidad en Navarra para dar un golpe sobre la mesa y relanzarse, en su afán por salir de la zona más peligrosa de la tabla. Para ello realizará un último ejercicio el sábado a las 9:30 horas en el campo principal del Estadio de los Juegos Mediterráneos.
El entrenamiento de la mañana del viernes, que tuvo como escenario el campo de la Vega de Acá, estuvo caracterizado por el orden que el míster quiso que los suyos tuvieran sobre el terreno de juego, para evitar comprometer el marcador frente a los rojillos. El balance ataque-defensa y distintas situaciones de juego coparon el tiempo de trabajo, durante el cual, por momentos, pareció verse que el técnico podría emplear un esquema similar al mostrado ante el Real Zaragoza y que tan buenos resultados dio.
En cuanto al apartado de ausencias durante la sesión, sólo se pudo contar con la de Julián Cuesta. El guardameta está totalmente descartado para entrar en la convocatoria de este fin de semana por la lesión que sufrió a finales de enero. La novedad fue la presencia de Iván Sánchez, quien tras no poder entrenar el jueves por un cuadro de gastroenteritis aguda, retomó la rutina del grupo con total normalidad.
También se ejercitó con el grueso de la plantilla Carlos Cuéllar. El central de la UD Almería, totalmente recuperado, dispone del alta médica, aunque deberá seguir poniéndose en forma para recuperar el mismo ritmo que tienen el resto de sus compañeros.
Cabe recordar que el Almería no tiene ningún jugador sancionado para este encuentro, pero que tanto Soriano como Antonio Puertas se encuentran apercibidos y, de ver una cartulina ante Osasuna, se perderían el choque en casa ante el Lugo de la siguiente jornada.