El Valencia de las dos caras

Como si de un camaleón se tratase, el conjunto ché cambia de color cada jornada. En Mestalla, todo es de color de rosa, es el día. Lejos de casa, oscuro y gris, es la noche. Nuevo revés lejos de Mestalla, en un encuentro en el que los de Nuno no generaron absolutamente nada en la segunda mitad. Mal rendimiento hasta el momento en las aventuras blanquinegras alejadas del Turia.

El Valencia de las dos caras
El Valencia de las dos caras. (Foto: Valencia CF).
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Por César Aldecoa Rodríguez

Ganarle al Real Madrid es todo un empujón. Pero hacerlo en casa y superándole en intensidad en todas las zonas del campo, es aún mejor. Pero claro, tras una victoria de esta índole, es necesario refrendarlo con tres puntos lejos de casa. Ya le pasó al Valencia cuando venció al campeón de Liga en Mestalla. Tras los tres puntos ante el Atlético de Madrid, los chicos de Nuno visitaron tierras gallegas, donde cuajaron el peor encuentro de la temporada, perdiendo por 3-0 ante el Deportivo de la Coruña.

Pero, parándose uno a repasar aquel compromiso, hay varios detalles a destacar. El primero, y más importante. El conjunto ché fue incapaz de hilar dos jugadas seguidas. Problema y grande, pues que un rival inferior te gane la posesión en su casa puede pasar, pero no ser capaz de tomar la iniciativa durante los 90 minutos es algo inaceptable. En aquella ocasión, nadie salvó al Valencia, que regresó a la capital del Turia con el zurrón lleno de goles.

Esta vez, la historia se repite. De nuevo, victoria con un Mestalla a rebosar ante un equipo madrileño, el Real Madrid al que se le tenía muchas ganas; y viaje hasta Galicia. Allí, fracaso estrepitoso del equipo de Nuno. El luso dio continuidad a todos los que pudo, pero volvió a tener los mismos errores que evidenció ante el Espanyol en Copa. Centro del campo poblado, pero totalmente superado por el rival. Delanteros completamente solos en ataque y desconexión defensiva en el peor momento. Ingredientes con los que el Celta consiguió volver a marcar después de más de 12 horas de juego sin hacerlo.

Sin juego fuera de casa

No es puntual, es un síntoma muy claro. El Valencia es incapaz de completar un encuentro igual lejos de Mestalla, que como lo hace cuando le arropa su gente. Son ya muchos choques en los que se ha dejado puntos; Granada, San Sebastián, Orriols, Coruña y ahora Vigo. Pero, en las victorias, tampoco se vio a ese Valencia duro e intenso. Tan solo se atisbó un férreo conjunto ché ante el Eibar, donde el juego ofensivo brilló por su ausencia. Tener tres centrocampistas en el medio debería hacer funcionar el juego igual que en Mestalla, pero no es así. En todos estos encuentros, el rival le ha ganado la batalla, y no es algo que tenga que ver con las piezas, sino con la intensidad y la actitud. Malos marcajes en defensa, llegadas tarde y una soporífera siesta en ataque, donde el conjunto ché es incapaz de generar absolutamente nada.

El conjunto ché generó dos ocasiones en todo el encuentro, pobre bagaje

Frente al Celta, el conjunto de Nuno Espirito Santo sabía que no iba a tener el balón, por lo que se agazapó en defensa y esperó a su oportunidad. Los primeros 45 minutos, sin ser excelentes, cumplieron este papel. El Valencia aprovechó su oportunidad, y defendió de forma correcta las llegadas celestes. Tan solo un error, que arregló Diego Alves, salvó el primero de Orellana. Mención aparte merece el brasileño, que detuvo un penalti más, uno que, curiosamente, no fue, ya que Otamendi tocó el cuero y no Charles. El guion estaba claro, estar arropados en defensa para salir a la contra, y con el marcador a favor, más si cabe.

Sin embargo, la segunda mitad fue una calamidad. El conjunto ché fue superado en todos los aspectos, en todas las zonas del campo, por un Celta comandado por Nolito. En ningún momento se pudo controlar el cuero para sosegar la iniciativa celeste, es más, los naranjas hicieron aguas en defensa, dejando a Orellana desquitarse y marcar de una vez por todas. En definitiva, una malísima segunda que vuelve a pesar al Valencia, que se deja dos nuevos puntos atrás y ve amenazada su cuarta plaza. Por el momento, los rivales que se le escapan al equipo de Mestalla no son los ‘cocos’ de la Liga, los que quiere convertir en rivales en peleas por algo más que plazas europeas, sino los más modestos. Conclusiones a sacar de ello.