Tras siete jornadas ligueras, pocos habrían ordenado a los equipos en la clasificación tal y como están situados en este momento del campeonato. Aunque es todavía muy pronto como para sacar conclusiones y aun se producirán bailes en las posiciones, lo cierto es que tras siete jornadas los conjuntos ya empiezan a pefilar cuales serán sus metas en esta temporada.
La del Valencia CF era volver a completar una gran campaña que le permitiera consolidarse en los 'puestos Champions', que tan caros se han vuelto últimamente. Pero lo cierto es que los números no complementan a este objetivo. Una nueva derrota, esta vez en San Mamés, deja a los de Nuno Espírito Santo con nueve puntos en el casillero, a seis del cuarto puesto (posición que logró ocupar la pasada temporada) y a siete de uno de sus rivales directos y actual líder de La Liga, el Villarreal. Además, el balance de goles no es nada positivo: cuatro a favor y cinco en contra, tres de ellos encajados en este último partido ante el Athletic Club. En resumen, un cúmulo de estadísticas que no acompañan, y que puede ser debido a varios factores.
Debilidad en defensa
Si tuviéramos que definir la defensa de la pasada temporada con una sola palabra esta podría ser solidez. En cambio, este año tal vez no sea tan correcto utilizar este término. Si bien es verdad que se ha perdido a uno de los pilares de el año anterior, también han llegado otros nuevos este verano. Hasta ahora el equipo sólo había encajado dos goles en liga tras seis jornadas, pero este dato se podría atribuir también a la gran actuación de uno de los jugadores revelación en este inicio de competición, Jaume Doménech, ya que la zaga valencianista, aunque ha demostrado en algunos partidos que puede estar a la altura de la de la pasada campaña, ha generado más dudas que seguridad. Aunque el registro de goles encajados tras siete partidos sea más bueno que malo, se puede apreciar no obstante una cierta debilidad en la primera línea del once.
Sin peligro en ataque
Pese a tener una de las mejores delanteras del campeonato, formada por Rodrigo Moreno, Negredo y Alcácer, los números en ataque tampoco acompañan. Los tres tenores blanquinegros no han conseguido materializar sus oportunidades y el dato estadístico de cuatro goles marcados tras siete partidos habla por si sólo. Pocas celebraciones en el área rival que pueden tener como causa principal la escasez de ocasiones claras. Es verdad que los de Nuno llegan constantemente al área rival, sobre todo ante rivales de menor potenial, pero o bien los centros no encuentran rematador, o el último pase se queda corto o se va largo.
Bajas constantes
Por último, las puertas de la enfermería valencianista no logran cerrarse del todo. Las lesiones han sido ya un factor determinante pese a que el campeonato todavía está en sus primeros compases. En la portería, las bajas primero de Alves y luego del recién llegado Matthew Ryan, que empieza a estar ya a disposición del técnico portugués, han puesto el foco sobre el que a priori partía como el gran descarte bajo palos, Jaume Doménech. En defensa, Gayà y Abdennour, titulares en la primera línea de cuatro, también se han visto apartados del terreno de juego de la misma forma que André Gomes en el centro del campo, quien, a pesar de estar ya disponible, recayó de su lesión el día de su vuelta. Jugadores todos ellos que tuvieron un papel destacado la pasada temporada.