Partido más sencillo de lo esperado el que se encontró la Fiorentina en el estadio del Esbjerg, donde los de Montella lograron la victoria por un gol a tres consiguiendo así, sentenciar prácticamente la eliminatoria. Tras dos meses preparando el encuentro, la viola consiguió finiquitar la eliminatoria en cuarenta y cinco minutos, dejando el resto de la eliminatoria para los menos habituales, aunque siempre prestando una máxima atención al desarrollo de la eliminatoria, ya que nadie descarta que el Esbjerg dé la sorpresa en el Artemio Franchi.

La Fiorentina salió con varios de los habituales, formando un claro 4-3-3 con el brasileño Neto en la portería, algo habitual en los esquemas de Montella, juntando por delante una línea de cuatro con Roncaglia de lateral diestro y el capitán Pasqual como lateral zurdo, junto a una pareja de centrales formada por Savic y Compper. Por delante, Montella optó por un línea de tres en la que juntó sobre todo calidad, dejando en el banquillo a Pizarro, pero añadiendo a Mati Fernández, a los que se le unían Aquilani y Borja Valero. De tres cuartos hacia delante, la Fiorentina dejó en el banquillo a los extremos puros, pero concentró a Ilicic, Ryder Matos y Matri en la línea ofensiva.

Frederiksen en cambio, optó por un 4-4-1-1, dejando a sus dos estrellas ofensivas en el banquillo, su pichichi Van Buren y el noruego Bakenga. El Esbjerg jugó con Esbjerg: Dúbravka en la portería, Ankersen, Drobo-Ampem, Jacobsen y  Knudsen en la defensa, un doble pivote formado por, Lekven y  Andreasen, dos hombre abiertos en banda como Lyng y Ankersen, con Fellah por delante en la mediapunta y arriba Pusic.

El partido se apreciaba atractivo, pero al resolverse tan pronto perdió un poco el interés. Todo lo importante transcurrió en la primera mitad. El primer gol de la Fiorentina se puede catalogar como magistral, sobre todo por la manera de bajar el balón de Matri, que tras ello, definió sin dejar caer el balón, poniéndolo en el palo más alejado del guardameta. Un minuto más tarde empataría el Esbjerg. Tras un fallo defensivo de la zaga viola, el delantero austriaco Pusic ponía el 1-1 en el marcador.

Apenas cuatro minutos más tarde, la Fiorentina volvía a adelantarse en el marcador, en una jugada en la que un centro mal rechazado por la defensa danesa, el esloveno Ilicic cazaba el esférico y con un toque de calidad con el interior de la pierna zurda ponía por delante de nuevo a los italianos. El Esbjerg tuvo alguna llegada más, pero Neto impedía las acometidas italianas. En una jugada más la Fiorentina iba a sentenciar el partido y a priori la eliminatoria. Un penalti clamoroso tenía como consecuencia el 1-3 en el marcador. Aquilani con tranquilidad sentenciaba el partido.

El segundo tiempo no tuvo más emoción, a parte de alguna que otra ocasión de la Fiorentina, que se hizo dueño y señor del partido. Con 1-3 acababa el encuentro,  un encuentro fácil para la Fiorentina, que se puede decir que ya está con la mente en Turín, aunque todavía quedan noventa minutos en los que cualquier cosa puede pasar.