Con la posibilidad de seguir como líder en solitario, el Bayern llegaba a esta novena jornada de la Bundesliga sin conocer la derrota. Con las bajas sensibles de Javi Martínez y Ribery, que vio el partido desde la grada, Pep planteaba una alineación con varios cambios. El Mainz, por su parte, se plantaba en el Allianz Arena con la necesidad de ganar. Tras haber empezado la temporada de una forma espectacular, con tres victorias en los tres primeros partidos, el quipo se quedó estancado, sumando solamente uno de los últimos quince posibles.

El planteamiento de ambos equipos en la primera parte dio lugar a unos primeros cuarenta y cinco minutos aburridos. El Bayern, tocando en el centro del campo, muy al 'estilo Pep', era incapaz de trasparsar el muro defensivo de un Mainz muy bien plantado en el campo. En toda la primera parte, Wetklo no tuvo que intervenir ni una sola vez. Los jugadores bávaros se desesperaron en un centro del campo en el que no encontraron espacios y dieron un paso adelante, adelantando la zaga y dando la oportunidad al Mainz de salir al contraataque. En el minuto 36, Parker desperdiciaba un contraataque en el que, de haber levantado la cabeza, habría visto a Nicolai Müller quedarse solo ante Neuer.

Unos minutos más tarde, Alaba se lesionaba tras un choque fortuito con Nicolai Müller, dejando su puesto a Alaba. En el minuto 43, con un Bayern venido arriba buscando huecos sin resultado, Boateng no acertaba a despejar un balón largo de Baumgartlinger y dejaba solo a Parker, que tumbaba a Neuer para poner el 0-1 en el marcador. Sin tiempo para más se llegaba al descanso, con un Bayern desorganizado y desesperado en un campo sin espacios y un Mainz crecido tras anotar en su único disparo a puerta.

Götze, al rescate

Desde el primer minuto de la segunda parte se pudo ver al Bayern de Munich que asombró la temporada pasada. El rodillo alemán renunció al juego de toque de Pep para adoptar una versión más vertical, consiguiendo así plantarse en el área con más facilidad. Este factor sumado al ingreso en el terreno de juego Götze, dejó ver a un Bayern completamente diferente. El dibujo de juego cambió al '4-2-3-1', situándose el ex del Dortmund en la mediapunta y Lahm de nuevo en la banda derecha; y funcionó. En el minuto 50, un pase entre líneas de Götze dejaba sólo a Robben en el área, que resolvía el mano a mano cruzando el balón a un Wetklo que no pudo evitar el empate. Dos minutos más tarde, una triangulación dentro del área entre Götze, Robben y Müller acababa con el gol de este último, que conseguía dar la vuelta al marcador en tan solo tres minutos.

El Mainz pagó sus imprecisiones

Con el 2-1 en el marcador, el Mainz tiró de coraje y se lanzó a buscar el empate. En tres minutos frenéticos, los de Maguncia estuvieron a punto de conseguirlo en tres ocasiones. Primero tras un tiro seco de Nicolai Müller que puso en problemas a Neuer. Y después, fueron Chupo-Moting y Moritz los encargados de meter el miedo en la grada con sendos disparos que se marcharon lamiendo el palo. El Mainz pagó sus imprecisiones, y en el minuto 69, Götze metía un balón al corazón del área que Mandzukic se encargaba de rematar al fondo de las mallas, poniendo tierra de por medio.

A partir del tercer gol, el partido fue un monólogo del Bayern. Con Lahm y Müller muy activos por la banda derecha, las llegadas eran constantes. En el minuto 80, Junior Díaz provocaba un penalti tras derribar a Schweinsteiger dentro del área. La imagen curiosa del partido la dejaba Robben, que lanzaba el balón con rabia tras ser excluido del lanzamiento de la pena máxima. Müller cogió el balón y no falló, poniendo el 4-1 definitivo en el marcador.

Con esta victoria el equipo de Pep sigue invicto tras nueve jornadas disputadas. A pesar de la abultada victoria, el equipo no dejó una buena imagen y fue capaz de remontar el partido gracias a las genialidades de Götze que fue, sin duda, el mejor se su equipo. Por su parte, y a pesar de la derrota, el Mainz fue un digno rival. No se rindió en ningún momento y buscó la portería de Neuer hasta el último minuto. La semana que viene buscará la victoria en casa ante el colista Braunschweig, mientras que el Bayern se centrará ahora el partido de Champions del miércoles frente a los checos del Viktoria Plsen.