El SGL-Arena, de Augsburgo, sería el escenario encargado de protagonizar en choque que abriría la jornada en Alemania, con uno de los duelos importantes del fin de semana, quemediría a dos de los contendientes que aspiran a estar en Europa la próxima campaña. Por un lado, los locales del Augsburgo, confirmados ya por derecho propio como la auténtica revelación de este año en la Bundesliga, ocupando plazas europeas antes del choque. En la esquina contraria del ring, el voluble Schalke 04, capaz de lo mejor y de lo peor, como bien demostró en el día de hoy.
Cuestión de actitud
Ya desde los minutos iniciales de partido se pudo ver lo que iba a ser la dinámica predominante del choque en su primera parte. Los locales, saltaron al césped a darlo todo, muy intensos y queriendo mandar en el partido, a pesar de su teórica inferioridad. Por su parte, el equipo de Keller, empezó el encuentro de un modo bastante contemplativo, sin rumbo y con una clara falta de intensidad. Con estos argumentos no fue de extrañar que cuando apenas pasaban cinco minutos del inicio, un balón en largo del portero fuera prolongado por Bobadilla, a quien Matip permitió cabecear sin problemas, para finalmente concluir en los pies de un eléctrico Tobias Werner, que logró plantarse solo ante Fährmann y poner el primero del partido.
La zaga minera era totalmente incapaz de frenar los envíos en largo de los locales
Este gol tempranero apenas alteró a los mineros, que siguieron remolque del Augsburgo. Los de Markus Weinzierl quisieron hacerse fuertes a través de la posesión de la pelota, pero ya desde muy pronto, se dieron cuenta de que la defensa de los de Gelsenkirchen estaba con el modo coladero puesto. Así pues, el Augsburgo dejó de complicarse con el balón y comenzó desarrollar un juego tan directo como efectivo, pues la zaga minera era totalmente incapaz de frenar los envíos en largo de los locales. El Augsburgo llegaba y llegaba al área, concretando hasta cinco ocasiones sobre la meta del cuadro visitante, que seguía mostrando una total inoperancia.
La defensa minera era incapaz de frenar los envíos largos del Augsburgo. (Imagen: schalke04.de)
Así paso más de media hora del partido, momento éste en el que Boateng decidió probar a Manniger con un disparo desde lejísimos, el cual, el veterano meta se mostró incapaz de rechazar en buenas condiciones, dando toda la ventaja a un excitado Huntelaar, que hizo el primero de los suyos. El gol, que confirmó al cazador como único jugador del Schalke en activo en el día de hoy, rebajó bastante los ánimos de unos y otros, lo que dio paso al final de la primera mitad.
Giro radical al encuentro
La segunda parte arrancó de un modo totalmente sorprendente, pues las tornas cambiaron radicalmente. El Schalke por fin pareció estar metido en el partido, ysalió dando buena fe de su superioridad, abarcando toda la posesión de pelota y obligando al Augsburgo a defenderse. Pasados cinco minutos de esta segunda parte, cuando el Augsburgo aún no había olido el cuero, Huntelaar anotó el segundo de los suyos. Fue gracias a una gran combinación de los mineros, que hicieron vascular a toda la defensa hacia el lado derecho, permitiendo a Kolasinac entrar solo por el izquierdo y asistir al cazador.
Huntelaar confirmó su gran estado de forma anotando su quinto gol en apenas un partido y medio
El gol llegó, curiosamente, a través de la conexión de los dos mejores del Schalke hasta el momento, y coronó el gran estado de forma de Huntelaar, cuyo gol supone el quinto del holandés en apenas un partido y medio. Después del gol, el Schalke continuó mostrándose más sólido y con el partido más controlado, ayudado, en parte gracias a la sustitución queKeller hizo en el descanso: Obasi, inadvertido hasta el momento, dejó su puesto al joven Ayhan, que pasó a ocupar un lugar en el doble pivote, dando a Boateng la libertad de poder actuar en tres cuartos. Con esta variante, el centro del campo ganó en seguridad, con dos mediocentros natos, más la ayuda de Boateng.
Huntelaar y Kolasinac, los mejores de su equipo en el choque, protagonistas del segundo gol. (Imagen:schalke04.de)
Alrededor del minuto 65, el Augsburgo decidió mover ficha, dando entrada a algunos hombres que variaron la dinámica del duelo, y volcándose completamente sobre la meta de Fährmann. Este cambio abrió muchos espacios en su defensa, facilitando al Schalke las transiciones ofensivas, y abriendo mucho el partido. Sin embargo, las ocasiones no llegaron para unos ni para otros, hasta los últimos diez minutos del encuentro, en los que los locales se abalanzaron completamente sobre el área minera,forzando una infinidad de saques de esquina, y llevando el “uy” a la grada en varias ocasiones. A pesar de las oportunidades, el marcador ya no se movería, proclamando al Schalke vencedor de la batalla.
El objetivo, más cerca
Este resultado permite a los de Keller enlazar dos victorias consecutivas, tras su último triunfo ante el Hoffenheim, y auparse hasta la tercera plaza. Además, su principal rival por esos puestos, el Bayer Leverkusen, se enfrentará al gigante bávaro, por lo que es bastante probable que logren mantener la plaza. Por su parte, el Augsburgo pierde una oportunidad de oro para afianzarse en puestos de Europa League, quedando a merced de lo que hagan en sus respectivos partidos Mainz, Hertha de Berlín y Borussia Monchengladbach.