La tarde del sábado prometía y mucho debido a los grandes duelos que se disputaban en la segunda jornada de la Bundesliga. Sin embargo, había uno especial. Un auténtico partidazo entre dos de los equipos más ofensivos de toda Alemania. El Werder Bremen y el Hoffenheim se veían las caras en el Weserstadion ante una gran espectación en las gradas de este precioso estadio.
El cuadro dirigido por Robin Dutt llegaba al partido tras lograr empatar ane el Hertha de Berlín con un cero a dos en contra. Querían debutar en casa con una victoria junto a su público y llegar al parón de las selecciones con una sonrisa en la cara.
En cambio, el TSG venía a Bremen como uno de los líderes del campeonato al ganar con gran contundencia al Augsburgo en un tranquilo encuentro.
Pues bien, el balón echó a rodar sobre el terreno de juego con ambos equipos muy bien situados. El Hoffenheim quiso llevar el peso y el dominio del partido en todo momento ante un Werder que esperaba atrás durante los primeros tramos del encuentro.
Control total del Hoffenheim con la incluida aparición de Firmino
A los diez minutos de juego, los visitantes crearon la primera oportunidad del partido mediante una gran jugada de Kevin Volland, quien optó por enviar un pase al hueco al delantero húngaro Ádám Szalai y, este, disparó el balón cerca la portería defendida por Wolf.
Sin embargo, poco después de esta llegada, el Werder Bremen fue en busca del gol respondiendo al rival con una rápida salida al contraataque tras un buen robo de Lukimya. Elia puso un complicado pase a di Santo para dejarlo solo ante Baumann pero apareció Bicakcic para cortar el balón con gran maestría.
El partido no paraba y en el minuto 19 de encuentro, Rudy mandó un preciso y perfecto balón en largo a la espalda de la defensa contraria hacia Roberto Firmino. El joven mediapunta brasileño realizó un precioso e impresionante control con el empeine para regatear al guardameta rival y marcar a placer poniendo el primer gol en el marcador.
En el ecuador del primer acto, el Hoffenheim tuvo su última clara ocasión antes de marcharnos al descanso. Szalai cayó a la banda izquierda y mandó un buen centro al área que estuvo a punto de ser rematado por Elyounoussi en boca de gol, pero el cuero se marchó por línea de fondo.
A falta de cinco minutos para la conclusión del primer tiempo, el centrocampista Hajrovic ejecutó, con su pierna izquierda, un gran lanzamiento desde unos 30 metros a la derecha de la portería defendida por Baumann. El arquero bávaro tuvo que hacer una gran estirada para mandar el balón a saque de esquina y evitar, lo que hubiera sido, el empate del partido.
El colegiado Robert Hartmann decretó el final de la primera parte tras estos primeros e intensos 45 minutos en los que el Hoffenheim llevó el peso del partido en todo momento. Dominaron el juego en cualquier parte del campo gracias, principalmente, a la gran actuación realizada por Firmino. Fue el jugador que más participó y eso se hizo notar. Además, Polanski y Rudy dieron mucho equilibrio y seguridad en el círculo central. Sin embargo, jugadores de ataque como Volland, Szalai o Elyonoussi no gozaron de gran protagonismo ya que el rival estaba muy bien situado. Por el contrario, el objetivo del Werder era esperar atrás y salir al contraataque con gran rapidez y. así, pillar desprevenido al conjunto dirigido por Markus Gisdol. Sin embargo, no fueron capaces de llevar a caba esta estrategia.
Ya con el comienzo de la segunda mitad, el cuadro local le puso otra cara al partido. Salieron con ganas, garra, fuerza, coraje y pasión. La charla Robin Dutt sirvió para poder sacar adelante un encuetro en el que estaban apagados. En cambio, el Hoffenheim inició este acto con demasiada parsimonia y tranquilidad, por lo que los locales se aprovecharon de esto con constantes llegadas a la portería defendida por Oliver Baumann.
Ya no eran capaces de controlar y dominar el partido ante un rival que presiona muy arriba y recuperan, rápidamente, el balón. Cada vez, los Werderaner iban llegando más al área rival mientras que el conjunto visitante retrocedía y reculaba su posición sobre el terreno de juego hasta tal punto de ternerlos acorralados en su propia campo.
Un gol que hizo venirse arriba a todo el equipo
A los 59 minutos de partido, llegó el empate para los visitantes. El argentino Franco di Santo recibió la pelota en la banda izquierda y, desde ahí, colgó un gran centro que fue controlado por Gálvez y bajado con el pecho para disparar con su pierna menos buena (izquierda) un tiro colocado y muy cercano al palo, haciendo inútil la estirada de Baumann.
Diez minutos más tarde de empatar el encuentro, García mandaba fuera, y por muy poco, un cabezazo en un remata tras el saque de córner ejecutado por Januzovic. El Bremen comenzaba con su festival en ataque mientras que el TSG estaba pasando por sus sus peores momentos. El partido se les empezaba a ser muy largo y querían que llegara ya el final.
Y de nuevo, crearon una otra ocasión más de gol. Esta vez, desde un saque de esquina en el que remató, en primera instancia, el central Prödl y Petersen tenía preparada la caña en el segundo. No obstante, su disparo se marcho fuera del arco rival por escasos centímetros.
El conjunto dirigido por Robin Dutt no se rendía y continuaban con su vendabal de llegadas y claras ocasiones. Un constante asedio ante un rival bloqueado y mal colocado sobre el césped del Weserstadion.
A diez minutos del final, di Santo estuvo a punto de convertir en gol una clarísima ocasión. Centro desde la derecha a la cabeza del argentino que remató en boca de gol, pero su disparo se marchó alto. No entró por un pelo.
A los 86 minutos de encuentro, Petersen iba a tener la última clara oportunidad para poner en ventaja a los suyos. Recibió un gran pase al hueco dejándole en un mano a mano con el guardameta rival aunque algo escorado. Le botó justo antes del golpeo y su disparo salió muy desviado. El Hoffenheim pudo respirar tras este fallo del delantero alemán. Anhelan el pitido final mientras que el Bremen desea un largo tiempo de prolongación para terminar de ganar este intento partido.
Finalmente, llegamos a la conclusión del encuentro con un empate a uno en el electrónico. Juego de muchas llegadas, oportunidades, ocasiones, intensidad y altibajos. Una primera parte dominada, al completo, por el Hoffenheim. A pesar de esto, no fueron capaces de llegar con cierta facilidad al área rival hasta que Firmino agitó su varita y abrió el marcador. Durante el descanso, las órdenes del técnico local fueron efectuados a la perfección por todos y cada unos de sus pupilos. Sin embargo, tuvieron una gran falta de efectividad a la hora de concretar las jugadas en gol.
La próxima semana no habrá partidos, al menos, en las ligas europeas. Esto se debe a que las selecciones comenzaran su andadura para la clasificación de la próxima Eurocopa disputado en Francia en el aó 2016. Además, algunas selecciones también jugarán partidos amistosos.
Tras este pequeño parón, la Bundesliga se reanudará con el inicio de la tercera jornada. Tanto el Werder como el Hoffenheim tendrán complicados rivales. El primero se enfrentará, como visitante, ante el actual lider de la liga, el Bayer Leverkusen. En este gran duelo intentarán obtener su primera victoria en la presenta edición del campeonato liguero alemán. En cambio, el conjunto dirigido por Marksu Gisdol jugará contra el Wolfsburgo para tratar de continuar en los puestos más altos de la clasificación.