Dos equipos llamados a hacer grandes cosas esta temporada se daban cita en el Volksgawen-Arena para medir sus fuerzas y seguir pujando por la Champions. Con los lobos cada vez más asentados y con un Mainz aún invicto en la Bundesliga, uno de los partidos más atractivos de la jornada daba comienzo con dos grandes bajas, una para cada equipo: Ricardo Rodríguez en los lobos y Jonas Hofmann en el Mainz.
El partido arrancó con una defensa local algo despistada, lo que le permitió al Mainz llegar al área con peligro en un par de ocasiones que atajó bien Benaglio. Pero el Wolfsburgo despertó pronto y comenzó el acoso y derribo a la portería de un Karius algo torpe en la tarde de hoy. En el minuto doce llegaba la gran polémica del encuentro, cuando un aletargado Karius sacaba un cabezazo de Olic de dentro de la portería, pero el árbitro no lo vio y el gol no subió al marcador.
Pero los lobos tenían hambre y, tres minutos más tarde, Naldo remataba un córner sacado por Schäfer al fondo de las mallas. El Mainz pareció despertar y buscó la réplica, pero un gran Benaglio le sacó un mano a mano a Djuricic para dejar el marcador a cero.
Antes del descanso, Perisic y Luiz Gustavo tuvieron la oportunidad de ampliar la renta en el marcador, peor la mala puntería lo impidió, salvando al Mainz de llegar al descanso con un marcador bastante más abultado.
Descanso y nueva avalancha
El descanso no calmó las ansias del Wolfsburgo que salió a matar el partido. El Mainz, indefenso y mal colocado en defensa, veía como De Bruyne, Perisic y compañía hacían maravillas en el centro del campo. Pero esta superioridad en el centro no culminaba en el área, debido principalmente a la mala puntería de los hombres de Hecking que hicieron de Karius el portero de la jornada.
En el minuto 57, De Bruyne tuvo una de las más claras, con un tiro seco desde fuera del área que obligaba a Karius a estirarse para sacar a córner. Schäfer la colgaba y otra vez Naldo demostraba su fuerza para alzarse por encima de toda la defensa y regalarle el gol a Perisic, que la tocaba levemente en el área pequeña.
Hasta dos uno contra uno desperdició Arnold
Con el segundo gol, el Mainz fue un juguete en manos del Wolfsburgo. Una y otra vez aparecía De Bruyne para crear alguna genialidad y, una y otra vez, no eran capaces de convertir delante de Karius. Hasta dos uno contra uno desperdició Arnold a pase del belga, mandando incluso uno al palo. En el minuto 86, Caligiuri cerraba el marcador tras un gran 'pase de la muerte' del recién ingresado Malanda.
Finalmente, el Wolfsburgo se convirtió en el primer verdugo del Mainz esta temporada tras ocho partidos sin conocer la derrota. Con esta victoria, los lobos se colocan en puestos de Champions mientras que el Mainz cae hasta la sexta posición.