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Victoria desde el córner

Se enfrentaban Werder Bremen y Stuttgart, ambos necesitados de puntos. Los locales no conocían la derrota desde que Skripnik tomó el mando, y el Stuttgart intentaba que sus fallos defensivos no volvieran a lastrarlos. Al final fueron dos jugadas a balón parado las que decantaron el partido para los locales.

Victoria desde el córner
Los jugadores celebran el segundo gol. | Foto: kicker.de
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Por Roberto Prieto

El partido comenzó pesado. Se veía que ambos conjuntos querían rodar el balón y combinar, pero ninguno de los dos encontraba la velocidad y verticalidad necesarias para abrir fisuras en la línea defensiva rival. Solamente Elia con algún desmarque de ruptura hacia la izquierda parecía intentarlo, aunque siempre sin éxito.

A los tres minutos Junuzovic se sacó un disparo desde el borde del área que se fue cerca del poste derecho de Kirschbaum. Y esa fue la única ocasión en los primeros veinte minutos de partido, hasta que Sararer, en una buena presión, le robaba el balón a García y encaraba la portería desde el costado derecho. Su disparo se fue cruzado.

Gol que desatasca el partido

Y tuvo que ser a balón parado como se inaugurara el marcador. Un córner a favor del Werder Bremen que botaba Junuzovic desde la banda izquierda era rematado, total e inexplicablemente libre de marca por Prödl. Uno a cero que mostraba más de lo visto en el terreno de juego.

Prödl pone el 1-0. | Foto: kicker.de

Después del 1-0 ambos equipos se soltaron ligeramente. Era el Stuttgart el que amenazaba primero. Un centro de Sararer fue rematado por Gentner. El balón salió fuera por poco. Más tarde fue Maxim, con un balón que se marchó alto, el que probó fortuna desde el borde del área para lograr el empate y finalmente Harnik, en una excelente jugada personal en la que se fue de varios defensores del Werder Bremen, quien se topó con la buena salida de Wolf. El último aviso por parte local de la primera parte lo daba Elia, que se equivoca al disparar desde una posición muy escorada. El balón se fue alto.

Final de los primeros 45 minutos. Un fallo en la marca condenaba a un Stuttgart que intentaba jugar el balón pero no encontraba el hueco. Era hora de remar a contracorriente.

Control en campo contrario hasta el gol

El Stuttgart salió dominando, y tenían la pelota en campo contrario. Maxim servía de enlace entre los pivotes y el ataque, pero de nuevo el juego del equipo carecía de peligro. Solamente a balón parado se lograba inquietar la portería de Wolf. Un córner terminaba con el balón en Rüdiger, que dejándose caer hacia atrás, remataba fuera.

El Werder solo lograba salir con alguna contra, y fue una de ellas la que derivó en el saque de esquina del segundo tanto. Junuzovic emulaba la pizarra de Skripnik y sacaba un balón raso al borde del área, donde aparecía Bartels completamente solo. Con un toque introdujo el balón en la portería, rozando el poste. Era el 2-0 y de nuevo un córner machacaba al Stuttgart.

Ida y vuelta, con gol anulado

El partido se convirtió en un ida y vuelta hasta el final. Ambos equipos tenían ocasiones pero ninguno las materializaba. El primero en avisar fue Di Santo para los locales. Después Harnik respondía para los suevos. Y a poco más de diez minutos para el 90, de nuevo un córner a favor del Werder Bremen era rematado en última instancia por Gálvez. Podría haber sido el tercero de no ser por la clara posición antirreglamentaria del español.

Y poco más en un partido marcado por las jugadas a balón parado. El Stuttgart continúa en descenso mientras que el Werder asoma la cabeza a la salvación. De momento Viktor Skripnik solo conoce la victoria y se perfila como el salvador en Bremen.