Solo unos días después de su regreso del stage invernal en Sudáfrica, el Wolfsburgo ha cerrado su segundo fichaje de este mercado invernal. Se trata del guardameta belga del Hoffenheim Koen Casteels, que ha firmado un contrato con los lobos hasta 2018. El traspaso ha sido cifrado en 1,5 millones de euros, pero no se espera que la llegada del jugador hasta principios de verano, ya que, según ha confirmado el propio Klaus Allofs, Casteels jugará lo que resta de temporada cedido en las filas del Werder Bremen.
Confirmada la noticia, Alexander Rosen, director deportivo del Hoffenheim, declaraba esto acerca del traspaso: “Koen no tuvo una situación fácil, el cambio le traerá nuevas perspectivas”, afirmó Rosen sobre su ya exjugador. En la otra esquina del triángulo, Viktor Skripnik, entrenador del Werder Bremen, apuntaba hace unos días lo siguiente acerca de la posibilidad de traer otro portero: “Tengo un número uno, y ese es Raphael Wolf. Quien venga será el número dos, tres o cuatro”. Unas palabras que dan a entender que pese a la llegada del belga, Wolf seguirá siendo el meta titular del Werder Bremen.
¿Quién es Koen Casteels?
Nacido en Bélgica hace 22 años, Casteels desarrolló prácticamente la totalidad de sus años de aprendizaje en el Genk belga, al que llegó en el año 2002. Tras siete años en las categorías inferiores del club esperando una oportunidad, el Hoffenheim pondría sus ojos en él, convirtiéndolo en jugador de su club sureño cuando Casteels apenas llegaba a los 19 años. Ya en el club germano, su trayectoria ha estado plagada de claroscuros, y pese a contar con las oportunidades suficientes, Casteels nunca ha terminado de convencer. El verano pasado, después de otra temporada algo irregular del meta belga, el Hoffenheim decidió firmar al prometedor Oliver Baumann, convirtiéndolo en su portero titular. Este hecho, unido a la grave lesión que ha mantenido a Casteels alejado de los terrenos de juego los últimos meses, ha propiciado la marcha del belga en este mercado.
Se trata de un portero muy alto y espigado, con buenos reflejos, pero bastante inseguro en líneas generales
Habitual en las convocatorias de la selección belga desde los 16 años, Casteels siempre fue considerado uno de los grandes arqueros de futuro de los diablos rojos, por encima incluso de Thibaut Courtois. Se trata de un portero muy alto (1,96 metros) y espigado, con buenos reflejos, pero bastante inseguro en líneas generales. Su mejor etapa se dio en la temporada 2012/13, donde, a sus escasos 20 años, logró salvar al Hoffenheim del descenso a segunda división. Tras esto, las apariciones del portero han sido muy irregulares, y jamás ha logrado dar la seguridad necesaria en un guardameta. Aun es joven, y su margen de mejora amplio, por lo que desde Wolfsburgo esperan que, con un maestro como Diego Benaglio de padrino, el meta termine por fin de dar ese salto definitivo en su carrera.
