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Victoria con aromas de homenaje

El Borussia Dortmund se impuso a un pobre Paderborn en un partido que supuso la mejor respuesta al anuncio de marcha de Jürgen Klopp. Los borussers cerraron un encuentro muy completo en el que dominaron de principio a fin, adaptando el estilo de juego a las necesidades que planteaba la muralla visitante.

Victoria con aromas de homenaje
Victoria con aromas de homenaje || Foto: BVB.
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Por Gerard Faiges

Más allá de la victoria local, la mejor noticia para los borussers fue la confianza que demostró el equipo, dominador del encuentro desde el primer minuto. Los de Klopp se impusieron a un Paderborn que supo montar una muralla en defensa y que obligó a los locales a adaptar su juego durante los 90 minutos. Los dos primeros goles llegaron con un Borussia Dortmund buscando los espacios y Kagawa cerró el marcador cuando ya estaban todos los huecos creados. Mkhitaryan volvió a deslumbrar en la primera ocasión que tuvo la familia aurinegra para homenajear a Jürgen Klopp.

El Signal Iduna Park se vestía como en las mejores galas para recibir a un Paderborn en horas bajas. El ambiente en el estadio borusser no era nada fuera de lo común pero cobró un sentido especial al tratarse del primer partido del equipo desde que Jürgen Klopp anunció su marcha del club al final de temporada. El Borussia Dortmund empezó enchufado, con ganas de homenajear al entrenador germano, pero solo era capaz de crear peligro en la portería visitante mediante disparos lejanos.

Sin huecos en la muralla visitante

Los disparos de Ginter y Gündogan eran el único remedio que servía a los borussers para atacar una defensa muy bien cerrada del Paderborn, que durante el primer cuarto de hora de encuentro se convirtió en un muro casi infranqueable. Tan concentrados en defensa, los visitantes solo pudieron crear peligro mediante faltas que merodeaban el borde del área y hasta llegaron a poner murmuros en los labios de los espectadores con dos posibles penaltis que el árbitro no consideró como tales.

Los disparos lejanos fueron el único remedio local ante la muralla visitante

Cercana la media hora de encuentro, el Borussia Dortmund pudo colgar los primeros balones con peligro en el área del Paderborn pero sin poder llegar de manera trenzada y combinando. Aubameyang obligó a Lukas Kruse a lucirse en un par de ocasiones arrebatándole el gol al gabonés en dos mano a mano. Minutos después, fue Mkhitaryan quien rozó el gol con un remate acrobático en la frontal del área pequeña que se acabó marchando fuera. A pesar de gozar de las dos mejores ocasiones del encuentro, los jugadores locales bajaron el ritmo y se acabaron marchando al descanso combinando y esperando a que el árbitro pitara el camino a los vestuarios.

Adaptados para crear espacios

Las dos jugadas con más peligro de la primera mitad, buscando centros y pases filtrados al área, fueron la clave para abrir la puerta de la muralla visitante. Dos minutos después de arrancar el segundo tiempo, llegó el primer gol del encuentro precisamente gracias a un centro al área. Aubameyang la puso desde la derecha para que Mkhitaryan se adelantara al primer palo para anotar de cabeza su segundo tanto de la temporada.

Poco a poco los jugadores de Klopp supieron encontrar espacios y empezaron a explotarlos mediante pases precisos que agrandaron los huecos en la zaga rival. Minutos antes de llegar a la hora de encuentro, la combinación local supuso un par de rechaces en la frontal del área del Paderborn y un balón regalado a los pies de Aubameyang, que batía a Klose picando lo justo el balón y anotando el segundo gol del partido.

La combinación da sus frutos

A partir de entonces, el Borussia Dortmund se dedicó a dominar y a disfrutar combinando. Los borussers volvieron a mostrar su mejor versión por lo que se refiere al juego de combinación, llegando hasta la frontal del área pequeña jugando al toque. De esta manera, y sin contar los goles, llegaron las mejores ocasiones para los locales que solo Kruse y la defensa en el último instante evitaron que el marcador fuera más abultado.

Los borussers encontraron huecos y los explotaron con el juego de combinación

Los locales se relajaron jugando con la posesión y aprovechando los huecos en la defensa rival y dieron la oportunidad al Paderborn de poder llegar a las inmediaciones de Weindenfeller, a pesar de que los visitantes no hicieron suficiente para crear peligro. Aubameyang demostró el buen estado del juego de toque de los de Klopp en una jugada muy elaborada que acabó con un gol anulado al gabonés por un fuera de juego muy riguroso. El entrenador visitante movió ficha buscando acumular jugadores en el centro del campo y en la zaga pero ninguno de los cambios realizados surgió a efecto.

Cuando quedaban diez minutos para finalizar el encuentro, Kagawa se convertía en el protagonista de un nuevo gol anulado por posición anti-reglamentaria de los locales. En el saque del fuera de juego, la defensa del Paderborn le dio la oportunidad al japonés de enmendar su error y regaló un balón a Mkhitaryan que la puso al hueco para que Kagawa batiera Kruse con un balón raso. La fiesta acabó con todos los jugadores y el propio Jürgen Klopp en eterna comunión con el público que llenó el Signal Iduna Park.