El fútbol aparte de goles, juego y calidad técnica de un equipo o un jugador en particular, también entran en juego las sensaciones y el momento de forma en el que estes. Un equipo con buena dinámica, buenas sensaciones y en un buen estado de forma, puede ser imparable. En Francia eso es lo que pasa con el Montpellier y Cabella especialmente.
Por otro lado, tenemos al Ajaccio, metido en una crisis de resultados y sensaciones, que no levanta cabeza, es de los peores colistas de las grandes ligas europeas y no parece que vaya a remontar el vuelo. Estos dos equipos, que representan el yin y el yan de la competición se enfrentaban ante si. El resultado, el esperado.
No dio opción
El resultado puede parecer, por el momento en el que han llegado los goles, que ha sido un partido en el que el Ajaccio ha plantado cara, pero no ha sido así. El Montpellier salió a arrasar des de el minuto 1, sabiendo de su gran estado de forma, y con la idea de no dejar que el Ajaccio se metiera en el partido y hacerles creer en poder conseguir los tres puntos.
El Ajaccio presentió un planteamiento con 5 defensas, y un doble pivote con lo que el objetivo no era ir a por la victoria desde el principio, si no en tapar huecos a los mediapuntas ( especial atención a Cabella), y dio fruto durante los primeros 45 minutos y diez de la segunda.
La segunda parte se hizo larga
A partir del gol de Mounier en el 55, el Ajaccio se abrió más y eso fue más perjudicial para sus intereses, ya que el Montpellier iba encontrando más huecos, Marveux y Cabella sobre todo iban encontrando huecos por el centro y las jugadas de calidad rebosaban. El doble pivote que puso en escena Bracconi se iba desmoronando y el sistema defensivo con cinco atrás creaba más dudas entre los propios zagueros que en los delanteros rivales. Asi fue que en el minuto 94, Cabella sentenció un encuentro que debió estar cerrado mucho antes.
Con este resultado, el Montpellier sigue escalando posiciones en la tabla, y a más de uno le hace pensar que sería de este equipo si hubiese empezado la temporada con la dinámica que tiene ahora. Seguramente estaría peleando por esas plazas que significan participación europea y estaría ahí en pugna con Lyon, Marsella, St. Ettiene y demás.
Por contra, el Ajaccio se hunde más en la tabla, y las sensaciones y el juego no son el esperado. Aunque jugadores con calidad tiene para remontar el vuelo, no parece que este muy dispuesto a ello. Se verá en las próximas y decisivas jornadas.