Bastia y Marsella empatan en un partido 'made in Bielsa'

Con un guión inmejorable, muy del perfil de Bielsa - no tanto de Makelele, mister local-, así arrancaron en esta Ligue 1 estos dos equipos. Frenético, ofensivo, vibrante y con muchas alternativas, así fue el partido. Goles, errores y aciertos por doquier los que se pudieron ver desde el principio del 'match', en unos primeros quince minutos que tuvieron de todo.

Así fueron las cosas, y es que cuando rozábamos el diez de juego los locales ya daban la primera alegría de la temporada a su parroquia en forma de golazo de Maboulou. El interior del Bastia no se lo pensó dos veces para aprovechar un error del joven Sparagna con un tremendo disparo desde muy lejos que Mandanda no pudo atajar. Brutal su tanto.

Tres goles en 17 minutos frenéticos

Este tempranero varapalo pareció meter en el partido a los de Marsella y pronto alcanzaron su remontada. Primero, el ariete francés Gignac mandaba al fondo de las mallas con un potente testarazo el gran centro de Mendy. Minutos después, era Romaric quien provocaba que Areola volviera a recoger un balón en su meta, con un despeje defectuoso que acabó en un gol en propia puerta. Así, en apenas 5 minutos, el OM dio la vuelta al luminoso.

Bien es cierto que el Olympique salió tremendamente frío al partido, pero pronto consiguieron imponer el fútbol de toque de su técnico argentino. De esta forma consiguieron darle la vuelta al tanto del Bastia y hacerse con el mando de un alocado encuentro.

Con el paso de los minutos el ritmo de juego se fue asentando y, con ello, el Bastia pudo frenar poco a poco las acometidas visitantes que tenían como su mayor puntal a un inspirado Thauvin partiendo desde el costado derecho. El equipo de Córcega se animó en los minutos finales, aunque más corazón que juego hasta el tiempo de descanso con el que se llegaría con el 1-2.

La locura volvía al partido con dos penaltis

Tras el paso por los vestuarios, los de Makelele salieron con las ideas más claras, como en el inicio del partido. Con el Marsella defendiendo a su merced, pronto pusieron en problemas a Mandanda con dos ocasiones, de Gillet y de Ayité a balón parado. Pero esta situación duró bien poco, volviendo los de Bielsa a tomar el mando y tranquilizando su ímpetu inicial.

Gignac y Tallo daban emoción al choque; Maboulou lo igualaba

En el minuto 60, llegaba la locura al partido de nuevo. Del posible empate tras una buena ocasión de Tallo, se pasó a un penalti cometido por Squillaci -impropio de un jugador de su veteranía- que Gignac se encargó de ejecutar.

Minutos después, y por si fuera poco, el encuentro volvía a dar una vuelta de 180º. Mendy agarraba a Maboulou dentro del área y el colegiado no dudaba a la hora de volver a pitar la pena máxima. Tallo no perdonaba en esta ocasión y engañaba a Mandanda para el 2-3.

Y esto no terminó aquí, tras el gol de Tallo, los de Makelele se envalentonaron a ir a por el empate y, aupados por su hinchada llegaron a él. Con una gran jugada individual beneficiada por la endeble defensa del OM, Maboulou volvía a marcar erigiéndose como el claro protagonista de la noche (3-3).

A partir de entonces, el Marsella se limitó a esperar un nuevo acierto de su 'as' de la delantera, Gignac, que cerca estuvo de firmar su hattrick a la salida de un córner, pero su disparo se fue rozando el palo. El Bastia tenía el partido donde quería, con un OM desesperado y a 10 minutos para el final donde todo podía pasar.

Tanto podía pasar que finalmente nada ocurrió. El miedo a perder de ambos fue más grande que su ambición por dos puntos más y así finalizó el debut de dos viejos conocidos de la Liga Española, Makelele y Bielsa, en los banquillos de la Ligue 1. Un punto tan justo como necesario para dos equipos que dieron buena imagen en lo ofensivo, pero que dejaron el defender para otra ocasión, algo que pudo aprovechar el espectador.

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