Buonatesta

El Burnley se enfrentaba a un rival directo como el West Bromwich Albion. Los locales, en descenso, debían ganar o empatar para salir de la quema, y así lo hicieron. El juego no fue emocionante y produjo más bostezos que aplausos en un día nublado con menos espectadores en Turf Moor de lo habitual. Primero Barnes y después Ings adelantaron a los del este de Lancashire con dos goles de cabeza, pero al filo del descanso Brunt hizo el 2-1 para acortar distancias. En el minuto 67, Ideye pondría la igualada en el marcador aprovechándose de la defensa del Burnley, que hoy no estuvo nada fina. Todos los goles se marcaron de cabeza, en un partido poco ortodoxo y frío, como la temperatura que imperaba hoy en Burnley. Este resultado, en realidad, no sirve de nada a ninguno, dado que ambos han de remar para alejarse de los puestos de abajo.

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Fuente: Premier League
merino96
Por Pablo Merino García

Dos equipos necesitados, en parecida situación en la tabla, con una ventaja cada uno. Para el Burnley ésta sería la de jugar en casa, arropado por una afición incansable. La del West Brom, nada más y nada menos, que la de contar con Darren Fletcher entre sus filas, recién fichado en el mercado invernal y sin haber pisado el verde con esa nueva zamarra, ya se sabía capitán.

El frío no sería impedimento para disfrutar de un juego muy disputado. Berahino en el banco por Anichebe y el marcar sería duro menester. Ings asomaba en casa de Foster, aunque su disparo se marchó muy arriba. Los baggies se encontraban con un muro en el centro del campo pese a tener esa llave en el centro del campo que tanta falta le hizo al equipo durante la primera vuelta: Fletcher. Esta vez iba a ser Arfield desde la forntal quien iba a probar al guardameta visitante. Parada magnífica que repele el cuero hasta la cruceta. Segundo susto para los de Pulis. Y a la tercera va la vencida.

El inicio de una victoria frugal

Ponía Boyd un centro desde la banda zurda para que lo recogiese Ings, cubierto por dos zagueros. Sin mirar la trayectoria del balón, Ings puso un centro al corazón del área. Ahí estaba su compinche arriba, Barnes, para rematar de manera genial lo que su compañero no pudo hacer tan bien. Gol tempranero para seguir creyendo en la consecución de un objetivo que ya no se antoja tan lejano.

Fuente: Premier League

No tardaría Tony Pulis en echar en falta al punta de Burundi. Tan solo 17 minutos. Anichebe al banquillo, contrariado con la idiosincrasia de un entrenador querido y odiado como es el señor Pulis. El Burnley iba en busca del segundo para llegar al descanso con tranquilidad. Bajo la niebla del este de Lancashire, los interiores Arfield y Boyd no acertaban a mandar centros precisos y el juego monótono en el centro del campo imperó en la totalidad de la primera parte. El West Brom se impacientaba y al atacar dejaba al descubierto una defensa que con Lescott nunca fue suficiente. Los de Dyche salían rápido a la contra, aprovechando la debilidad de sus rivales en la línea de atrás, pero Arfield no tenía el día y las bandas hoy, a diferencia de en otras citas, estaban sosas, pues el juego se tuvo que volcar en un centro del campo en el que el Burnley no está acostumbrado a jugar.

Pero apareció Boyd para dar la tranquilidad que los locales necesitaban. Desde la banda, recogiendo un balón aparentemente muerto pero con mucha intención en sus costuras. Galopó por la banda escarchada del Turf Moor y centró milimétricamente para que la bola llegase a la persona de Danny Ings. Para que llegase a una cabecita de oro que daba el 2-0 tras impactar contra la madera de Foster y dormir en sus redes. Jugada simple, de las que gustan en Premier. Medio gol de Boyd, inexpugnable; medio de Ings, matador.

Con este gol, Ings se erige como cuarto goleador nacional -contando a Berahino -, con 8 tantos en el zurrón

Justo cuando la primera parte iba a morir, los baggies recortaron distancias desde la esquina. No hicieron méritos para marcar, aunque tampoco para encajar dos. Demasiado castigo pensaría el dios del fútbol. Macmanaman botaba un córner que llegaría al corazón del área chica, encontrando una jauría de jugadores empujándose por hacerse con la pelota. El más listo de la clase fue Brunt, que desde la segunda línea, se coló por un hueco entre tanto despiste y remató al larguero para que después el solito caminara hacia el interior de la portería. Victoria al descanso minimizada por ese gol en los estertores del encuentro. Partido minimizado por un juego bronco, parco y reservón de dos contendientes que, en principio, debieron arriesgar mucho más.

Fuente: Premier League

La segunda mitad comenzó con una marcha más por parte de ambos. Pronto decaería. Ings hacía de las suyas en tres cuartos y también en el centro. Se atrevió a driblar a dos rivales en una zona peligrosa. Tocaba el día de la inspiración, uno de tantos. Pero el West Brom no se quedaba atrás. Berahino se revolvía por toda la frontal, en dura brega con Trippier por alcanzar alguna pelota y hacer un empate muy posible.

De cabeza también llegó el empate

Pasaron los minutos y la puerta no se abría. Sería otra vez desde la esquina como los de Pulis conseguirían la igualada fruto de uno de sus cambios. El saque lo cazaba Ideye en el primer palo, aprovechando la falta de jerarquía defensiva del Burnley en jugadas a balón parado. Jones se desentiende del recién ingresado en el terreno de juego y así el nigeriano convierte el tanto y hace el empate. Primer gol en lo que va de temproada. Valiosísimo primer gol.

Los cuatro goles fueron marcados de cabeza

Shackell estuvo a punto de poner el 3-2 en el luminoso, también de cabeza, pero Lescott despejaba en la línea de gol. El partido se ponía de cara para los throstles a pesar de algún que otro arreón de los locales, que llegaban poco, pero con mucho peligro. Los segundos 45 minutos fueron más bien tediosos, con una dinámica del peloteo que recordaba al voley playa. Fletcher no tuvo el estreno esperado, e incluso hizo un penalti que el colegio Mike Dean no vio. Mano clara que hubiera supuesto la muy factible victoria del equipo claret. La igualdad era cada vez más evidente y la realidad del empate sería una realidad justa.

Fuente: Premier League

En los estertores de la contienda apretó el acelerador al máximo el West Brom. Los fallos clamorosos de la defensa local posibilitaban ocasiones calrísimas para los delanteros rivales. Shackell se trababa con el balón a escasos metros de la porteria, con Berahino tomándole las espaldas y rematando a gol amén a esa fragilidad entre los dos centrales.Tom 'Salvador' Heaton dejaba en su feudo otro punto que no significa demasiado pero que a la larga, puede significar mucho o no significar nada. Con este empate, el Burnley adelanta al Hull City y sale de los puestos de descenso, mientras que el West Bromwich Albion sigue decimoquinto, a un punto del Sunderland. Cuatro goles de cabeza para dos pollos sin cabeza en una liga con mucha cabeza.

Puntuaciones Premier League VAVEL

Burnley (2) West Bromwich Albion (2)

Heaton 6 Foster 3
Trippier 7 Baird (46') 5
Shackell 3 Dawson 5
Keane 4 McAuley 5
Mee 5 Lescott 4
Marney (46') 4 McManaman (82') 6
Jones 5 Fletcher 4
Arfield 6 Yacob 5
Boyd 7 Brunt 6
Barnes 7 Sessègnon 6
Ings 7 Anichebe (17') -
Suplentes
Kightly (46') 6 Berahino (17') 7
- - Ideye (46') 6
- - Morrison (82') -