Dame N'Doye debuta en casa a lo grande

10 de diciembre de 2015, norte de Inglaterra, dos equipos en horas bajas se ven las caras, el empate sería fatal para ambos y la derrota más aún para el perdedor. El equipo local, el Hull City, saca de inicio a un delantero senegalés de 29 años que hace su debut como titular y disputa su primer partido en casa tras jugar algunos minutos ante el Manchester City. Este fichaje que pocos conocían se convierte, en apenas unos minutos, en la estrella del partido.

Ya desde el comienzo, N'Doye parece tener a la afición ganada. Las cámaras se centran en él y cuando el speaker canta su nombre todo el estadio se pone en pie. Sin comenzar el partido, la confianza en él era máxima.

Dado el pitido inicial, el Aston Villa dispuso de la primera posesión y de gran parte de la posesión del esférico durante bastantes minutos, sin embargo el Hull City era quien parecía tener más claro a qué jugaba. Nikica Jelavić presionaba muy arriba y recibía buenos balones de su pareja en la delantera: Dame N'Doye, la pareja tiger parecía asustar a los centrales contrarios. A pesar de esto, Andreas Weimann ejecutó el primer disparó del partido poco antes de los diez minutos de encuentro pero su chut salió muy desviado.

El partido parecía destinado a dejar pocos goles. Las áreas las pisaban los propios porteros y poco más. El Aston Villa era quién mandaba en el comienzo pero sus llegadas no eran para nada claras y McGregor apenas tuvo que intervenir. Las faltas estaban a la orden del día y no ayudaban a crear juego por parte de ningún equipo a pesar de que Carles Gil, junto a Agbonlahor, intentase darle vida al partido de cualquier manera.

Al más puro estilo inglés

Si en algo se caracteriza este Hull City es de saber aprovechar su formación (1-3-5-2) para o bien jugar al toque o bien al contraataque, pero en escasas veces al pelotazo. En el primer gol del partido los chicos de Steve Bruce utilizaron este método para, en tres toques, marcar el primer gol del partido. Como si del Stoke City de Tony Pulis se tratase, Allan McGregor sacó de puerta con mucha fuerza, N'Doye pinchó el balón y rápidamente se lo envío a Jelavić, que en carrera chutó ya dentro del área y marcó con la fortuna de que el balón tocó lo justo en Clark y el esférico pasó por encima de Guzan.

Con apenas dos toquecitos de balón, N'Doye se ganó al KC Stadium. La televisión, sin embargo, enfocaba algo más importante, las pancartas de los aficionados del Aston Villa que pedían la destitución de su entrenador, Paul Lambert, aquel que tantas alegrías le ha dado a su equipo y que ahora tiene la difícil misión de sacar a los villans de la zona de descenso.

Tras el 1-0, el Aston Villa bajó mucho los brazos, sus intentonas pasaron a ser cada vez más flojas y apenas lograrón chutar a portería y menos entre los tres palos. N'Doye, mientras tanto, pudo hacer el 2-0 en una buena contra de Elmohamady que el senegalés remató de muy mala manera. Antes del descanso, el propio N'Doye tuvo que ser atendido y protagonizó todas las agonías del estadio, por suerte, pudo continuar jugando.

Ni Benteke pudo arreglarlo

Este Aston Villa tiene mucho que mejorar. Desde el minuto 30 de partido estuvo calentando Christian Benteke hasta que salió en el descanso en sustitución de un desaparecidísimo Andreas Weimann. El juego villano, basado en la posesión y en distribuir el juego mediante Delph y Westwood pareció nulo. Los centrales tigers lo sacaron todo, tanto Dawson, como Bruce y McShane se compenetraron a la perfección para evitar que pasase nadie por su zona.

Benteke, que al igual que su equipo ha pegado un bajón de forma importante, tuvo alguna que otra oportunidad de chutar a portería y hacer gol, pero la fortuna no le acompañó. Carles Gil fue el mejor villano pero tampoco tuvo suerte durante todo el partido, el español se está adaptando bastante bien a la Premier League.

A quince minutos del final llegó la sentencia del partido. El Hull City intentaba dormir el partido y perder tiempo, algo que Elmohamady sabe hacer muy bien. Tras unos largos saques de banda, el colegiado Michael Oliver señaló falta a favor del equipo local en tres cuartos del campo rival. Meyler sacó rápido para el carrilero egipcio y este se sacó un gran centro que remató el recién entrado Gastón Ramírez como pudo, el esférico fue a parar a la bota de N'Doye que remató al cuerpo de Guzan, el balón le volvió y a la segunda lo envió al fondo de la red con un golpeo a la escuadra contraria perfecto.

Partido listo para sentencia. Solo Benteke pudo evitar la derrota pero las dos ocasiones que tuvo, la segunda bastante clara, no fueron materializadas y los tres puntos se quedaron en el KC Stadium de Kingston Upon Hull. Con la victoria, los tigers suben al 15º puesto y dejan atrás los puestos de descenso donde ya aparece el Aston Villa de Paul Lambert.