Hasta la jornada clausural tuvimos que esperar para conocer el último equipo descendido a la Championship. El Hull City, que cumplía su segundo año consecutivo en la Premier League, pierde la categoría y el año que viene jugará en la segunda liga del fútbol inglés.

Tras la confirmación de los descensos de Queens Park Rangers y Burnley hace un par de jornadas, llegábamos a este último partido con la duda de si sería el Newcastle o el Hull City el equipo descendido restante. 

El Newcastle encaraba esta jornada 17º con 36 puntos, por 34 de los tiger que ocupaba esa catatónica última plaza de descenso. Si los toon vencían se acababa la historia. El Hull City necesitaba ganar al Manchester United y que el Newcastle perdiese. Finalmente el Newcastle superó por 2-0 al West Ham y además los de Bruce no pasaron del empate contra el Manchester United.

El bagaje de ocho victorias, 10 empates y 19 derrotas no ha sido suficiente para un equipo con recursos básicos, que ha peleado durante toda la temporada hasta el final, pero que no ha conseguido el premio final de la permanencia. Como admitió el propio Steve Bruce, el equipo a fin de cuentas "no fue suficientemente bueno".