La Roma enfrenta al Udinese en la jornada 36 de la Serie A y llega  a estas instancias jugándose el segundo lugar en pleno, mientras que el equipo de Stramaccioni solo podía jugarse el orgullo. La Lazio ejercía presión venciendo un día antes a la Sampdoria y Rudi Garcia sabía que su equipo no podía dar un paso en falso.

Con Gervinho lesionado y Di Natale fuera de la convocatoria, ambos entrenadores se jugaron una carta distinta: Garcia le dio la titularidad a Iturbe, que había estado teniendo cada vez menos minutos gracias a la llegada de Ibarbo, mientras que Stramaccioni prefirió la juventud de Perica en la delantera.

El partido arrancó con gran intensidad, la Roma intentaba lanzar a sus extremos gracias a los pases en profundidad de Totti que bajaba a buscar balones en el círculo central, el Udinese no se cerraba y buscaba el contragolpe, pero De Sanctis a los pocos minutos de iniciado el partido se veía obligado a intervenir debido a un pase largo lanzado a Badu que le ganaba en velocidad a los centrales romanistas, en la misma acción el defensor giallorosso Manolas quedó adolorido por un choque con su arquero, nada grave.

La grave situación para la Roma llegaría minutos más tarde cuando después de una ocasión desaprovechada por Pjanic en el área rival, el Udinese aprovecha una niñería de Manolas que al intentar despejar/pegarle el balón al rival para ganar un saque de meta, falla su propósito e impacta al mismísimo Thereau que se ve favorecido y se conduce hacía Morgan De Sanctis, quién logra tapar su disparo, pero no el del joven Perica que consigue marcar a puerta vacía su primer gol en Serie A.  

Sin embargo nada cambiaba, el equipo liderado por Totti buscaba el empate y el Udinese intentaba aprovechar las numerosas distracciones de la defensa romanista. Ibarbo ya se había mostrado peligroso en minutos anteriores, esta vez ganaba un tiro libre peligroso que sería cobrado por el capitán de la Roma: Disparo fortísimo de Francesco, Karnezis de gran actuación logra salvar el resultado, Mapou se ve favorecido por el rebote y luego de una serie de firuletes inesperados, consigue librarse de dos adversarios y dispara alto.

A diez minutos del final el encuentro seguía 1-0 a favor de los visitantes y por poco logra aumentar su ventaja después de que Perica se liberara de Torosidis y rematara de cabeza sin fastidio alguno. Ibarbo, que había sido el más peligroso del equipo romanista, recibe el balón desde la derecha, se zafa de dos rivales con un taco estupendo y remata de zurda, Karnezis nuevamente, logra detener el disparo.

Decisivos los minutos finales del primer tiempo con el Udinese que no aprovecha un contragolpe, y la Roma con la misma medicina, logra vacunarlos después de que Pjanic desde el fondo apoyara a Totti y este sirviera a Nainggolan para que el belga empatara el encuentro antes de irse a los vestuarios. Pero no terminaba la primera parte después del gol giallorosso. Thereau consigue una falta a 25 metros de la portería rival y Guilherme dispara potentísimo, impactando así el travesaño, De Sanctis ni se inmutaba.

Empezaba la segunda parte con los mismos 22 jugadores en campo, la defensa de la Roma pagaba no tan caros sus errores: Primero con Yanga-Mbiwa que no logra anticipar a Thereau que desde la derecha acelera y dispara fuerte al primer palo que cubría De Sanctis, bien por el portero que logra detener con un pie el disparo del atacante de Udinese. Minutos más tarde se redimía Mapou recuperando en modo prodigioso un posible encuentro entre De Sanctis y Allan que se había escapado de los defensores de la Roma segundos antes.

Luego de haberse salvado, la Roma logra la ventaja tras un centro de Nainggolan que no logra controlar Francesco Totti y tras una confusión entre Heurtaux y Widmer, aparece Torosidis y logra abatir a Karnezis. Del infierno al paraíso, todo en nombre de Grecia.

Ambos entrenadores hacen sus respectivos cambios: Rudi Garcia busca cubrirse sacando a Totti por Keita, mientras que Stramaccioni le daba la oportunidad a Bruno Fernandes y a Kone por Pinzi y Perica.

Los locales empiezan a administrar bien el resultado y en el minuto 80 Nainggolan se acerca a su doblete personal: Iturbe logra despuntar y superar un adversario, sirviendo así a Radja que de taco logra rematar, tapa Karnezis y el balón termina impactando en el palo. Más tarde existiría una buena combinación Pjanic-Cholevas, el último que buscaba un protagonismo griego en su totalidad, disparaba de manera brutal, el tiro un poco desviado termina en el travesaño de la puerta de Karnesis.

El partido, después de cuatro minutos añadidos por Banti, finaliza y le concede al equipo giallorosso volver al segundo puesto a +1 de la Lazio. Todo por jugarse en la penúltima fecha del campeonato donde se dará lugar al derby de la capital.