Tras el gran debut de Fredy Montero en el Sporting 5-1 Arouca, era de esperar que tanto Benfica como FC Porto dieran un golpe de autoridad en la primera jornada de la Liga Zon Sagres.
Pero nada más lejos de la realidad, ya que ambos equipos se han mostrado vulnerables fuera de casa, hasta el punto de que Benfica no ha superado a Marítimo y FC Porto solamente lo ha hecho cuando su rival jugó con 10.
Benfica empieza perdiendo.
Benfica llegaba a Barreiros con la intención de disipar las dudas surgidas en pretemporada y para ello contó Jorge Jesús con su equipo de gala, incluyendo a Djuricic en la media punta, a Amorim en el centro, a Enzo escorado y a Bruno Cortez en el lateral izquierdo.
Si bien las águilas tuvieron bastantes opciones en la primera mitad, pero José Sá se bastó para disipar el peligro y fue Marítimo quien se adelantó al borde del descanso tras un penalti señalado a Artur. (Derley, 46´).
Tras el descanso Jorge Jesús introdujo cambios que dieron resultado en primer instancia ya que llegó muy pronto el empate (Rodrigo, 51´), pero pese a seguir dominando y a desperdiciar numerosas ocasiones, volvió a adelantarse el equipo local, en esta ocasión por medio de Heldon en el minuto 78.
Hasta el final buscó disipar la ventaja Benfica, pero comienza la liga con una desventaja de 3 puntos con respecto a su principal rival, FC Porto.
FC Porto no respiró hasta el minuto 88.
Tras su gran partido en la Supertaça, Paulo Fonseca introdujo varios cambios, ya que Danilo ocupó el lugar de Fucile y Josué el de Varela.
Tras un buen inicio ofensivo, en el que Jackson tuvo un gol muy claro, Rafael Martins, en el minuto 14, adelantó a los locales que jugaron una primera mitad muy valiente.
Las ocasiones fueron llegando para ambos equipos hasta que tras la reanunadación, llegó la jugada más influyente del partido, tras marcar de penalti Josué, el meta "sadino", Kiezseck, fue expulsado tras llegar a las manos con el goleador "portista".(48´)
El ambiente se enrareció en gran manera y en medio de la confusión, Juan Quintero, que llevaba un minuto en el campo, hizo el 1-2 con un disparo fantástico a los 61 minutos.
Pese a jugar con 10 hombres, los locales siguieron apostando por la victoria y en un contragolpe, Jackson Martínez sentenció un partido muy sufrido a falta de dos minutos para el final.