El año pasado Serbia venció al conjunto luso en la tanda de penaltis (3-2) y días más tarde se consagró campeón del Europeo sub-19 venciendo a Francia. Pero este año la suerte se mudó de acera. Después de ser una de las selecciones con más poder ofensivo de la competición, Portugal debía superar el último escoyo, la actual campeona.
La 'Seleçao das Quinas' inició bien el encuentro con un buen dominio del balón y generando mucho peligro desde las bandas con Gelson Martins e Ivo Rodrigues, tras la actuación menos brillante de Marcos Lopes. Al pasar la primera media hora de juego los serbios fueron equilibrando la balanza y en un par de ocasiones podían haberse adelantado en el marcado, pero André Moreira lo evitó.
En el segundo tiempo no existió un dominador claro. Ambos equipos tomaron precauciones y evitaron correr riesgos en defensa y ahí la calidad del juego cayó notablemente. En las pocas llegadas de peligro generadas por ambas selecciones siempre estuvieron atentos los guardametas y si no era el caso, la falta de puntería de los delanteros hacía que el marcador del Pancho Stadium siguiera intacto.
El Tim Krul portugués
Se inició la prórroga con mayor dominio serbio. El conjunto luso no tenía ideas claras con el balón en los pies, se notaba el cansancio. Para empeorar las cosas, o para mejorar, André Moreira se lesionó en su rodilla izquierda, en su lugar entraba el que sería el héroe inesperado, Tiago Sá. Portugal seguía desaprovechando las pocas oportunidades que tenía. En el minuto 104, Romário Baldé sólo ante el portero desaprovechó la más clara de los lusos en todo el partido.
En la segunda parte de la prórroga nuevamente fueron los dirigidos por Hélio Sousa los que desaprovecharon la oportunidad de evitar la tanda de penaltis, aunque en esta oportunidad fue más por mérito de Rajkovic, quien detuvo un cabezazo a bocajarro de Domingos Duarte (min.110).
Así se llegó a los penaltis y aquí es donde apareció Tiago Sá. De los cinco penaltis portugueses, únicamente Tomás Podstawski fue el que falló. Por parte de los serbio Gacinovic lo envió a las nubes y Milinkovic vio su remate ser detenido de gran forma por Tiago Silva, el Tim Krul portugués.
El próximo jueves, a las 19:00 horas, Portugal se verá las caras ante Alemania, quien venció por 4-0 a Austria en la otra semifinal, en la gran final del torneo a disputarse en el Estadio Ferenc Szusza, en Budapest.