Comenzó la última toma de contacto de los pilotos de MotoGP antes del inicio del Mundial, dentro de dos semanas en Qatar. Fue una buena jornada para la Suzuki de Aleix Espargaró, cuarto mejor crono tras las Ducati y la Honda de Márquez. De esta forma, ratifica el buen rendimiento de la marca de Hammamatsu y muestra su buena adaptación a la primera moto oficial que tiene la oportunidad de llevar en su carrera deportiva.
Con un mejor crono de 1:55.698, Espargaró se quedó a cuatro décimas del mejor tiempo de Iannone. En un circuito en el que ya brilló el pasado año, el de Granollers sigue mejorando una Suzuki que se espera que dé guerra en su vuelta al Mundial. "Hoy nos centramos en adaptar el 'setup' al trazado, que es nuevo para nosotros, y dejarlo así preparado para la carrera de dentro de dos semanas", aseguró Espargaró.
El piloto catalán comentó que "los tiempos por vuelta no son malos pero aún hay margen de mejora". Una de las conclusiones a las que hoy llegó el piloto de Suzuki fueron los dos compuestos de neumáticos: "Probamos tanto el blando como el duro: el blando es más competitivo, aunque no está hecho para circuitos como Qatar y se deteriora muy rápido. Me siento más cómodo con el duro, ya que su ritmo no es mucho más lento y el grip cae después de las 10 u 11 vueltas", admitió el mayor de los hermanos Espargaró.
El de Suzuki añadió que "hasta ahora hemos probado la misma confuguración con la que corrimos en Sepang 2, haciendo mejoras paso a paso, particularmente en el control de tracción", pues lo considera "la clave para encontrar más consistencia con el neumático duro en las tandas largas". Por último, aseguró que "tenemos algunas actualizaciones para los próximos dos días pero nuestra prioridad es encontrar más tracción y un 'setup' convincente para la carrera".
