Rafael Nadal debutó con victoria en el Barcelona Open Banc Sabadell - Conde de Godó. El tenista balear se encontró con un Albert Ramos muy agresivo y que no perdió la cara del encuentro en ningún momento. Rafa, que desde la derrota en Montecarlo ante David Ferrer no había saltado a pista, es consciente de la dificultad que ello acarrea. "Cuando uno viene de perder un partido, siempre es complicado jugar el siguiente, y más cuando juegas con un jugador que viene de jugar y que ganó ayer en un buen encuentro a Davydenko. Todos los partidos son complicados", aseguró el número 1 del ranking mundial, consciente de que hoy no ha jugado bien. "He hecho el partido que esperaba hacer. No esperaba salir aquí y jugar muy bien hoy. Sabía que sería un partido tenso, complicado y que pasaría por momentos difíciles. Creo que no he puesto ninguna mala cara en todo el encuentro, he aceptado los errores que he tenido y he peleado el siguiente punto sin pensar en ello. Y eso es lo más importante cuando uno sabe que está cometiendo errores y no le entran golpes ganadores", prosiguió.
El partido tuvo mucho desgaste físico, en el que primaron los peloteos largos. A priori, en estos territorios el tenista balear se muestra superior a su rival, pero en la tarde de hoy no se apreció. Rafa sufrió y supo sufrir. "He sufrido durante todo el partido. Cuando juegas con un jugador que está jugando bien y no haces tu mejor partido, lo normal es sufrir. Yo he perdido una gran oportunidad con el 6 a 5, que cometí tres errores. Creo que he hecho un buen tiebreak, sin hacer cosas espectaculares pero jugando de forma segura y sin cometer errores. Contento por esto. En el segundo set me ha costado un poco hacer break", reconoció el balear, que durante un juego en el segundo parcial notó un calambrazo en su mano izquierda. "Ha habido un momento en el que se me ha acalambrado un poco la mano y me costaba cojer la raqueta, pero son detalles del partido que uno tiene que ir superando. Sé que es un dolor que es momentaneo, que después pasa. Lo que sí que me ha pasado en un juego importante, con tres a dos mío y quince iguales. Yo sentía que era el juego para hacer break y ponerme con 4 a 2, pero después por suerte no me perjudicó. ", continuó.
El tenista balear también tuvo tiempo para hablar sobre la gran sorpresa de la jornada: la derrota de David Ferrer. "David venía de jugar bien en Montecarlo y hoy ha jugado contra Gabashvili, que ha jugado muy bien y no ha podido ganar. Eso demuestra la dificultad que tiene este deporte", reconoció Nadal, para el que perder no es extraño. "Lo normal no es ganar 8 veces consecutivas Montecarlo ni 8 veces el Godó. Lo normal es perder, seguir luchando, tener opciones de ganar. Así es como tiene que ser y supongo que así será. Y en este caso, para mi era un partido difícil y lo he superado. Eso es lo más importante. Mañana tengo una nueva oportunidad y espero estar preparado para aprovecharlo", manifestó.
Para Rafa Nadal sólo existe el día a día. Tras ganar a Albert Ramos, su próximo objetivo es el partido de mañana. "Mi objetivo máximo a dia de hoy es el partido de mañana. Hoy era el partido de hoy. Contento con la victoria. Soy consciente que tengo que pasar esos momentos complicados que he pasado hoy. Los he sabido sufrir. Hoy era un partido complicado. He jugado sin ningún brillo pero sí con pasión, intensidad y con ilusión por ganar. Por esto he ganado el partido. Feliz por ello y confio en jugar mejor mañana", espetó Nadal. Un Nadal que mañana se enfrentará con el verdugo de Feliciano López, el croata Ivan Dodig. "Es un jugador bastante completo. Lo hace todo bien. Tiene buen saque, buenos golpes desde el fondo, se mueve bien... Es competitivo. Hoy ha ganado en un buen partido a Feli. Es el segundo partido seguido que gana y viene con confianza. Yo tengo que hacer mi partido y jugar agresivo", reconoció el español, que augura un encuentro difícil en la jornada de mañana.